Dos agentes de la policía local fueron agredidos el pasado domingo durante una intervención en la barriada de Aldea Moret. Todo ocurrió pasadas las 17.50 horas, en la calle Río Tíber, cuando una vecina de la zona denunció vía telefónica en la jefatura que unos jóvenes habían abierto las llaves de riego de los jardines para bañarse "tirando una gran cantidad de agua", según indica la policía en su parte diario de incidencias.

Una dotación se trasladó hasta el lugar de los hechos para comprobar la denuncia. La intervención se saldó con dos detenidos, una mujer y su hijo menor de edad, "por agresiones y resistencia", según confirman fuentes policiales. Al parecer ambos opusieron resistencia a la detención y provocaron lesiones a los agentes, que tuvieron que ser atendidos con posterioridad en un centro médico. Según las mismas fuentes la mujer causó también daños en el vehículo patrulla.

La madre y su hijo menor tuvieron además que ser atendidos en un centro de salud pero, según informó ayer el ayuntamiento, "no existe parte de lesiones por ninguna de las partes".

OTRA DENUNCIA El suceso no acabó aquí, sino que poco después de la intervención policial la mujer que había denunciado los hechos por teléfono en la jefatura volvió a solicitar otra vez la presencia de los agentes, ya que algunos de los que trataron de impedir la detención del menor "la habían increpado y amenazado en la vía pública por llamar a la policía y se encontraba muy nerviosa", según recoge el parte de incidencias. Los agentes le indicaron los trámites a seguir por si se decidía a denunciar lo ocurrido pero, cuando la policía llegó de nuevo al lugar de los hechos, los individuos ya habían abandonado el lugar.