La parcela del matadero se encuentra en suelo urbano, en el que están autorizados los equipamientos genéricos, categoría que incluye usos muy diversos: hoteles; establecimientos de ocio; centros docentes, sanitarios, culturales, religiosos y administrativos, o instalaciones deportivas, pero no admite la utilidad comercial. La situación de los terrenos que rodean el ferial es parecida: el antiguo campo de aviación es un suelo no urbanizable genérico, no tiene ninguna protección que dificulte su cambio de calificación, pero con la que tiene actualmente no se puede urbanizar.

El ayuntamiento cuenta con una propuesta para el matadero, que incluye los usos comerciales, y con otra de 12 hectáreas junto al ferial, con una inversión de 30 millones de euros, según hizo público el alcalde en julio. Aunque los promotores de esta iniciativa compren el suelo a particulares, todo el terreno que rodea el ferial es ahora no urbanizable. Hay otra propuesta, de menor importe y superficie y promovida por empresarios locales en el ferial, que se acometería en terrenos de propiedad municipal.

El plan de urbanismo está actualmente en periodo de revisión, aunque está en su fase inicial, y difícilmente estará aprobada definitivamente antes de dos años. La otra alternativa es la modificación puntual del plan, proceso más corto, pero que no se resolvería antes de seis meses.

El ferial y el matadero no son los únicos sitios de los que se ha hablado en los últimos meses para la instalación de un centro de ocio. También ha habido contactos, que cuentan con el beneplácito del ayuntamiento, para dar esta utilidad a las 5,5 hectáreas que ocupó Campsa junto a la carretera de Mérida, aunque en este caso también sería necesaria una modificación del uso urbanístico del terreno. Lo mismo ocurre con el solar de Las Carmelitas, un sitio que interesa al Corte Inglés para instalarse en Cáceres y que tiene un uso docente, no comercial.