El reglamento de participación ciudadana continúa su lenta implantación en la ciudad. Tras la campaña de difusión que se inició el pasado mes de junio --una pancarta en el balcón del ayuntamiento y el inicio del reparto de 10.000 libretas con el lema ´Contigo hacemos ciudad´-- que tras el parón de los meses de verano, se retomará en los próximos días, la concejalía prepara el nombramiento de los concejales de distrito, los ediles que estarán al frente de cada una de las cinco zonas en las que se organizará Cáceres: centro-casco antiguo, norte, oeste y sur. La intención es que estos concejales se designen en el pleno ordinario de octubre, aunque "podría aprobarse también en algún pleno extraordinario previo", explicó a este diario la concejala responsable, Carmen Lillo.
La edil se refirió a los plenos en los que se debatirán temas como el PGM o la RPT, que no estarán en el ordinario de septiembre.
Según figura en el reglamento, la Concejalía de Distrito será la representación del ayuntamiento en cada uno de ellos y al frente de la misma estará un edil delegado designado por la alcaldía. Se ocupará de impulsar y supervisar los servicios municipales y además presidirá el Consejo de Distrito. Este es el principal órgano de funcionamiento de los distritos y de él formarán parte además un concejal de cada grupo político, y distintos representantes de los colectivos sociales de la zona, así como varios vecinos.
La designación de esos concejales es la que deben abordar PP y PSOE, que elevarán la relación al pleno, mientras que en el caso de Foro Ciudadano e Izquierda Unida, los concejales delegados serán Felipe Vela y Santiago Pavón, respectivamente.
METODO DE GESTION El consejo de distrito no tiene poder de decisión --al contrario de lo que sucede en las grandes ciudades con este modelo de gestión--, pero será el motor que implique a la ciudadanía en la gestión municipal. La ubicación de las sedes en cada caso es otra de las acciones que se debe someter al pleno municipal, aunque "ya están definidos los posibles emplazamientos", apuntó Lillo. De esta forma, el edificio Valhondo será la sede del consejo de distrito centro-casco antiguo; la del oeste estará en La Madrila y la sede del el sur se ubicará en la casa de cultura Rodríguez Moñino. El distrito de las pedanías no tendrá una sede fija, e irá rotando entre cada uno de los enclaves, mientras que la sede del distrito norte se debate aún entre Aguas Vivas, Gredos y Mejostilla.
Al margen de la designación de los políticos que se incorporarán a la dinámica de distritos, la concejala tiene previsto reunirse con los colectivos sociales para solventar las carencias. "Hay un número importante de entidades sociales en el distrito centro, pero en otros nos hay colectivos de mayores, de jóvenes, de mujeres o de discapacitados", tres grupos que deben estar representados en todos los consejos. Para salvar esa situación "deberán elegir un representante en cada caso", resolvió.
Además, para dar un impulso a la organización de la ciudad a través de distritos, el ayuntamiento está buscando a un coordinador de Participación. Lillo eludió dar nombres, aunque apuntó que el perfil es el de: "una persona con experiencia en presupuestos participativos, que se ocupe de poner en marcha este modelo de ciudad", explicó. La concejala quiere que esté definida además, antes de noviembre, la "gran campaña" que se llevará a cabo en 2010 para que Cáceres comience a funcionar según este nuevo reglamento.
