Los promotores de la operación para que se instalara El Corte Inglés en Cáceres recurrirán una sentencia que les obliga a devolver 1,2 millones al gigante comercial, tras no haberse completado las gestiones conducentes a la instalación de la firma que preside Dimas Gimeno. El Juzgado número 5 de Cáceres ha notificado hoy oficialmente a las partes la sentencia que da la razón a El Corte Inglés, que reclamó judicialmente el dinero depositado a través de dos avales, después de decidir rescindir el contrato a finales de 2012 y desistir del proyecto en Cáceres.

La sentencia estima la demanda presentada por el gigante comercial "por incumplimiento de contrato de compraventa de cosa futura", contra la promotora y el BBVA, este último, depositario de los dos avales contratados en el transcurso de la operación. La congregación de las Carmelitas y Estudios Urbanísticos y Medioambientales firmaron en noviembre del 2005 el contrato de opción a compra sobre una porción del solar en el que se encuentra el colegio, de 7.140 metros y se pactaron prórrogas sucesivas hasta 2010; (desde 2007 lo gestionó Almonte). Al mismo tiempo, la empresa y El Corte Ingles suscribieron un compromiso de actuación urbanística sobre una porción de 3.200 metros de ese solar en los que se levantaría el centro comercial, vinculado al contrato con las monjas. En los trámites sucesivos, la empresa entregó los dos avales por 174.000 euros (en 2005) y 1.044.000 euros (en 2006), que ha demandado judicialmente. En el año 2010, cuando aún se tramitaba el proyecto, venció el derecho de opción de compra sobre el solar, aunque las conversaciones entre las distintas partes siguieron al menos hasta finales de 2011, según recoge la sentencia. El juez considera que se ha incumplido el contrato porque los promotores no adquirieron el terreno en el plazo pactado y "no se aprobó el convenio --urbanístico con el ayuntamiento-- ni los proyectos de urbanización en los plazos pactados" y añade que "no es lo mismo construir un centro comercial en 2008 que 6 años después".

Fuentes de la empresa Estudios Urbanísticos y Medioambientales, que inició la operación a tres bandas con la congregación (titular del solar en el que se proyectó El Corte Inglés) mostraron ayer su desacuerdo con la sentencia. "No compartimos los argumentos", afirmaron. Rechazan que haya incumplimientos por su parte y anuncian que para Estudios Urbanísticos y Medioambientales "el contrato se mantiene en vigor" por lo que recurrirán la sentencia ante la Audiencia Provincial. Las mismas fuentes manifestaron además su indignación con el juzgado, por haber hecho pública una sentencia antes de ser trasladada a las partes afectadas.

Por su parte, desde El Corte Inglés señalaron ayer a este diario que para ellos el contrato está "anulado". "No quiere decir que El Corte Inglés no tenga intención de instalarse en Cáceres en un futuro, aunque dónde y cuándo lo decidirá el área de Expansión", añadieron desde la cadena comercial.

TRAMITES Y RETRASOS La operación urbanística ha estado plagada de dilaciones y contratiempos. En 2002 El Corte Inglés se fijo en Cáceres y en 2005 se concretó la operación en las Carmelitas, lo que requería agregar al uso docente de la parcela, el residencial y terciario. El ayuntamiento tendría que recibir además 12.000 metros de terrenos por el incremento de la edificabilidad. Tras varios retrasos, en 2011 los promotores entregaron al ayuntamiento los 18.000 metros (en el Parque del Príncipe y el Paseo Alto) y se desbloqueó la operación.

Se inició entonces la redacción del plan especial y se aprobó inicialmente en 2012. Unos días antes de completarse el trámite, los responsables de El Corte Inglés decidían resolver unilateralmente el contrato e iniciar las acciones judiciales. En diciembre de 2013 se aprobaba el plan especial de forma definitiva y en 2014 el responsable de El Corte Inglés anunció que abandonaba el proyecto. Fue en respuesta a una carta remitida por el PSOE y daba dos razones para desvincularse: que el trámite administrativo no había acabado, y que la demora había coincidido "con la crisis que soporta el país, en particular en el consumo".