Bajó enseguida, cogió un extintor, intentó apagar el fuego y me sacó de la cocina. Es digno de admirar lo que hizo". Pilar Díaz se llevó ayer por la mañana un susto que no fue a más por la rápida intervención de un vecino y de los bomberos. Por la tarde quería agradecer la colaboración que recibió de inmediato de su vecino, Antonio Leo, cuando salió a las escaleras a pedir socorro porque se incendiaba su cocina, una gratitud que también mostró con los bomberos, "que llegaron enseguida". "Todos se han portado de maravilla", repitió en alusión a su vecino, a los bomberos, a la policía y a los servicios sanitarios.

Pilar tiene 64 años y ayer, al poco de llegar de hacer la compra, se le incendió la cocina. En ese momento estaba sola en la casa y quiso apagar el fuego con un trapo. El incendio solamente afectó a la cocina, aunque la vivienda se llenó de humo y también las escaleras del bloque. Los servicios sanitarios la trasladaron a la clínica San Francisco, pero a las pocas horas ya estaba en casa y ella misma aseguraba que no fue nada grave, "solo el susto y el haber inhalado un poco de humo". Según informó el 112, las lesiones que sufrió fueron por intoxicación por humo. En la clínica se le suministró suero, oxígeno y se le dio un calmante.