Se vuelve taranta y seguiriya al subir a un escenario. Es fiel a sus principios y a su apellido de tronío cacereño. Raquel Cantero posó en una de las boutiques de mayor renombre de la ciudad y dejó sin sentío a EL PERIODICO cuando le cantó por soleares.

--¿Le cuento un secreto?

--Si me lo cuentas no será secreto.

--Gracias a usted aprendí a amar el flamenco...

--Es un orgullo haber atraído a este maravillo mundo del flamenco a una persona de tu categoría.

--Y me aficioné a La Niña de los Peines...

--Hiciste muy buena elección. Yo también me aficioné hace muchísimos años a La Niña de los Peines: la mejor cantaora que ha habido a lo largo de la historia.

--...Y a su taranta

--A su taranta, sus peteneras, sus tangos, sus seguiriyas... todo lo que hacía, lo hacía fenomenal.

--Esa taranta de la Niña decía: Ni los templarios de Roma, ni aquél que inventó los dobles tormentos te tienen que querer tanto como yo te he estado queriendo...

--¡Ya ves, no dice ! El flamenco encierra en muy pocas palabras unas verdades enormes.

--Han pasado 15 años, pero ya entonces su voz inundaba el Auditorio del San Francisco...

--Han pasado muchos años y espero seguir muchos más.

--¿Dónde dejó su melena?

--¡Uy, mi melena! había que cambiar de aires y un día decidí cortármela, pero no hablando metafóricamente ¿eh? que yo tengo cuerda pa rato.

--Cantero: tiene apellido de tronío cacereño...

--El apellido me pesa, pero con mucho orgullo. Soy Cantero y lo voy a defender a capa y espada. Mis padres, Eugenio Cantero y Nina Díaz, son cantaores, mis hermanos vienen conmigo en el grupo... el flamenco en mi familia ha estado presente desde siempre. Mi abuelo Demetrio también fue un cantaor bastante conocido en el ambiente flamenco de los años 40 y 50.

--...Y una estética flamecopop que siempre me ha seducido...

--Gracias (ríe). Cuando subo al escenario soy flamenca por los cuatro costados, procuro guardar la estética flamenca por excelencia. Me pongo mi vestido de volantes, mis peinetas, mis mantones, mis flores... pero luego me gusta ser una persona normal y corriente, con unos vaqueros, con unas zapatillas de deporte... la sencillez va mucho con mi forma de ser.

--Lo digo por el tono de su móvil...

--(Carcajada) ¡Ah! sí, porque tengo a Bisbal y Chenoa... Bueno, es que me gusta escuchar todo tipo de música y esa canción, Escondidos , me gustó y la tengo en mi móvil.

-- Escondidos (...), atrapados, sin poder salir del interior, de tu interior, mientras que hacemos el amor... Un poco fuerte ¿no?

--¿Fuerte? Es realista, como la vida misma. Y el que quiera oír, que oiga.

--Siguiendo por esta línea, ¿Raquel, es cierto que los hombres quieren con la entrepierna y las mujeres lo hacen con el alma?

--Si quieren así es que no quieren de verdad. El que quiere, quiere con el corazón independientemente de que sea hombre o sea mujer.

--¿Tras una fiesta flamenca una mujer ama con la furia de una luna llena o eso es una leyenda?

--(Más risas). Cuando uno termina una fiesta flamenca lo que acaba es reventao y no piensa en otra cosa más que en descansar.

--¿Se ha preguntado alguna vez: por qué no estará junto a mí cuando amanezca?

--Normalmente está junto a mí.

--¿Cuántos corazones ha roto?

--Que yo sepa uno, y con ese uno me es suficiente.

--Es mujer de un solo hombre...

--Por supuesto. En una pareja la fidelidad es fundamental porque en el momento que eso falla es que está fallando algo más grave. Si estás a gusto con alguien no tienes por qué buscar nada fuera. Llevo 12 años con mi novio y espero que sean muchos más.

--Cuando se es adolescente todo son sueños, cuando se cumplen los 40 se acumulan las facturas...

--Las facturas, los problemas... pero como no he llegado a los 40 esa es la suerte que tengo. Sigo teniendo muchos sueños y espero seguir teniéndolos cuando cumpla los 40, y los 50, y los 60. Una persona que no tiene sueños no tiene nada.

--¿Cómo se sobrevive siendo mujer en un mundo flamenco?

--Aunque hay ambientes donde la mujer flamenca no está bien vista, afortunadamente eso está cambiando y hoy día una mujer se desenvuelve igual que un hombre, pero no solo en el flamenco, en cualquier tipo de ámbito.

--¿Usted es purista o si viniera Vale Music con un cheque en blanco sería otra Niña Pastori?

--Soy purista y si viniera Vale Music con un cheque en blanco no dejaría de ser Raquel Cantero. Imitaciones nunca han sido buenas y segundas copias tampoco. Si no me aceptan tal como soy, lo que hago, mi trabajo, en otro momento será. Soy muy fiel a mis principios, tanto en el trabajo como en la vida. El flamenco es el género que más ha evolucionado pero la evolución viene determinada por los artistas. Escuchas una fuente antigua y la haces tuya porque insertas una serie de variantes, ahí está la evolución: que cada uno le imprima su personalidad. Me parece bien buscar sonidos extraños utilizando el flamenco, pero no lo comparto.

--Perseverancia no le falta...

--Cuando me falte no estaré aquí.

--¿Me dedica una soleá?

--Te dedico una soleá trianera que aprendí de Paco Taranto en Sevilla. Fue la soleá que más me impactó, por la letra, porque es preciosa: Si quieres ver si te quiero vela mi sueño esta noche, ya verás en mi desvarío como yo te llamo a voces .