La ronda Norte se protege del ruido. Las obras para la instalación de pantallas acústicas demandadas por los vecinos avanzan en el tramo comprendido entre la calle Aries y la rotonda que conecta con el R-66B. La actuación municipal, con cargo al segundo Plan E, está siendo ejecutada por la empresa Ingeniería Acústica Extremeña con un presupuesto de 200.000 euros y debe estar finalizada el próximo mes de septiembre, según los plazos.

Aunque los vecinos alertaron la semana pasada de que los trabajos se habían parado, ayer confirmaron que las máquinas siguen colocando los paneles para aislar acústicamente las viviendas del residencial El Arco, en el ala derecha de la ronda Norte. Las mamparas, de color verde, están surtiendo efecto, según explicó Felipe Moreno, uno de los vecinos cuya vivienda está situada junto al cinturón viario.

Pero para instalarlas ha sido necesario retirar una parte de los setos y la alambrada que separaban la ronda del carril para bicis y peatones paralelo a la calle Aries. Los vecinos piden que se mantengan en las mismas condiciones que estaban antes para evitar que las pantallas acústicas puedan convertirse en murales para los grafiteros. Ayer ya había pintadas en algunas que dan a la carretera y que no son visibles desde la calle Aires.

La petición de las pantallas acústicas se remonta a hace seis años cuando se hizo la ronda Norte, un cinturón de seis kilómetros planificado para una intensidad diaria de 10.000 vehículos, que costó 21 millones de euros a la Junta.

Los vecinos llegaron incluso a dirigirse al Defensor del Pueblo para que el ayuntamiento atendiera su solicitud debido a las molestias que sufrían por el tráfico de vehículos, en aumento a medida que van pasando los meses según la versión vecinal. Ahora ya empiezan a ver hecha realidad el deseo de estar protegidos contra el ruido por unas mamparas de estreno.