A solo un mes de cumplir sus primeros cuatro años, la ronda norte ya ha logrado superar la media de los 550.000 vehículos mensuales durante la primera mitad del 2008. En concreto, esta vía urbana de 6,3 kilómetros ha sido utilizada de enero a junio por 3.396.309 conductores, cifra que arroja un promedio mensual de 566.051 coches. Y aunque los responsables de la Policía Local cacereña aseguran que todavía hay ciudadanos que se resisten a tomarla como alternativa, lo cierto es que ya se aprecia una disminución del tráfico en el eje Delicias-Hernán Cortés-Virgen de Guadalupe, "que debería tener aun más fluidez, pero a muchos conductores les cuesta cambiar sus rutinas", subraya Emeterio Corchado, inspector jefe de los servicios operativos de la jefatura, quien ha facilitado los datos.

El volumen de vehículos que actualmente canaliza la ronda es considerable: cada día saca del centro 18.868 coches de modo que no se satura a cualquier hora la zona de Hernán Cortés. Pese a ello, este eje, por su ubicación estratégica (conecta el centro con todos los residenciales del norte y con el campus), mantiene un flujo elevado "aunque con niveles más aceptables que hace unos años", indica Emeterio Corchado. Por tanto el descenso se ha notado de forma general en Hernán Cortés, y muy especialmente en el tránsito de vehículos de mayor tonelaje, que prefieren tomar la ronda norte (rápida y cómoda), y que eran los que provocaban sucesivas colas.

AHORRA TIEMPO Y GASOLINA De hecho, la ronda ofrece ventajas en todos los aspectos, según recuerdan los responsables de la jefatura: menos tiempo en cruzar la ciudad hacia puntos de las zonas norte, oeste y sur; menos interferencias de tráfico al disponer de dos carriles por sentido que facilitan el adelantamiento; una conducción más cómoda al existir solo semáforos peatonales en las rotondas, y por tanto menos paradas; más ahorro de combustible; y mayor seguridad.

En concreto, uno de los aspectos que ha contribuido a incrementar el tránsito ha sido el aumento del límite de velocidad desde los 50 kilómetros/hora iniciales hasta los 80 km/h que se permiten hace año y medio. "Es una vía concebida para la descongestión del tráfico, por ello la velocidad inicial era un poco tediosa y el motivo de que muchos conductores no utilizaran la ronda", señala Emeterio Corchado. A ello se une la seguridad de esta vía por su amplitud y trazado. "No suele haber accidentes relevantes", indica el inspector jefe.

Aun así, "la dinámica del tráfico es caprichosa y a los ciudadanos les cuesta adaptarse a las nuevas situaciones, aunque redunden en su propio beneficio --explica Emeterio Corchado--. En el caso de la ronda, poco a poco se han dado cuenta de que ofrece ventajas importantes y ahora el volumen que registra ya parece más acorde con las perspectivas. Al principio extrañaba el bajo número de conductores que la frecuentaban, ha costado cambiar de hábitos", agrega.

Actualmente la ronda es utilizada sobre todo por los vecinos de los residenciales de Mejostilla (la zona ha ganado miles de viviendas en los últimos años y continúa en expansión, con cientos de inmuebles en construcción y zonas comerciales), por los ciudadanos que se desplazan al polígono industrial Las Capellanías y, en menor medida al campus universitario.