El presidente de la Agrupación Vecinal de Cáceres, Miguel Salazar, afirmó ayer que dejará el cargo cuando este colectivo se lo pida, "un órgano en el que están representados los intereses generales sin distinción de clase, ideología o pertenencia", dijo. Responde así a la petición de cese que formuló Juventudes Socialistas por sus declaraciones sobre el homicidio de La Madrila y la obra de Mira al Río.

"En el fondo les ha molestado que destaque el valor del alcalde para sacar adelante el proyecto de Mira al Río, pero jamás se pronunciaron cuando le hice reproches", indica. "Yo firmo mis escritos, pero ellos se refugian en el anonimato de un colectivo y opinan que lo suyo es democracia y lo mío no", lamenta.