Garantizar la seguridad en las entradas y salidas al nuevo colegio, por estar éste ubicado en una carretera nacional, es para los directivos del centro escolar una prioridad.

No existe dificultad ni peligro alguno en lo que a la entrada se refiere, ya que existe un carril de desaceleración, pero el padre Francisco Arias reconoce que las salidas si encierran cierto riesgo. "Por la ubicación del nuevo colegio la salida de él hacia Cáceres requiere ir hasta la rotonda de Las Capellanías para hacer el giro, algo que consideramos supone un riesgo para los alumnos que acuden al centro en motocicleta".

Responsables del colegio trataron este tema con representantes del ayuntamiento y ya se ha dado una solución. "El ayuntamiento, como propietario de los viales de La Sierrilla, nos ha dado el permiso necesario para que los ciclomotores salgan del colegio hacia Cáceres por esta zona, pero no obstante estamos asimismo en conversaciones con la comunidad de propietarios de La Sierrilla, pues deseamos contar también con su autorización", señaló el director.

Así, tanto el acceso peatonal al colegio como la salida de los ciclomotores se hará por esta urbanización, algo que según matizó el padre Arias será algo temporal, "pues cuando esté terminado el nuevo acceso a Cáceres no habrá ningún problema, ya que además de los cuatro carriles habrá una vía de servicio que será la que utilicen los ciclomotores y otros vehículos para salir".