El alcalde de Cáceres, José María Saponi, acudió ayer a visitar a los familiares de las víctimas en el tanatorio San Pedro de Alcántara y calificó el mortal accidente como "una tragedia ante la que uno se queda sin habla". El regidor que tuvo conocimiento de los hechos la misma noche del suceso, intentó consolar a las familias y dijo que "espera que con el tiempo éstas puedan recomponer la situación, porque lo que no van a poder olvidar es esta enorme tragedia". Saponi añadió también que conocía a las tres familias cacereñas e indicó, sobre las posibles causas del suceso, que se trató de un accidente "fortuito y desgraciadísimo que ha tenido unas consecuencias tremendas".