El alcalde José María Saponi insistió ayer en que en la instalación de terrazas en el hípico hubo una autorización a un grupo de hosteleros para el uso temporal de una propiedad que es municipal, y no una concesión administrativa que necesitase de un procedimiento abierto y público.
El abogado de siete establecimientos de hostelería, cuyos propietarios se sienten perjudicados por el permiso dado por el ayuntamiento en el hípico, adelantó el miércoles que en el plazo de cinco días presentaría una querella criminal contra el alcalde y el concejal de Juventud por la concesión sin concurso público del uso del hípico.
Saponi apuntó que el anuncio de que se iban a querellar contra él "no es una de las principales preocupaciones de este ayuntamiento, me preocupa más lo de antes --previamente había hablado del futuro uso de las instalaciones de la base de Santa Ana--".
El alcalde, que ayer compareció ante los medios de información para dar a conocer los actos del décimo aniversario del grupo de ciudades patrimonio de la humanidad, subrayó que el ayuntamiento "ha hecho lo que tenía que hacer" en el hípico, y recordó que la autorización concedida a un grupo de cinco empresarios de hostelería para que montasen barras y una pista de baile "termina ahora", ya que el próximo fin de semana se celebrará en este recinto un concierto del grupo La Oreja de Van Gogh y el 12 de octubre tendrá lugar la fiesta del día de los universitarios.
