La sede vecinal de Hispanoamérica, única asociación de la ciudad que carece de edificio propio, ha sufrido un nuevo revés. Las obras, que tendrían que haber comenzado en junio del año pasado, no se iniciarán hasta el próximo mes de mayo, según confirmó ayer el concejal de Mantenimiento, Joaquín Rumbo, que reconoció "el muchísimo retraso" de esta actuación y culpó de su demora a los trámites administrativos.

Aunque parece que el inicio de la obra este año está asegurado --el presupuesto del 2007 contempla una partida de 350.000 euros para la construcción del edificio en la calle Teide (junto al centro de salud San Jorge)-- lo cierto es que no cumplirá los plazos marcados: se habló primero de junio del 2006 y luego de febrero del 2007.

Rumbo calculó ayer que la actuación comenzará en dos meses puesto que, aunque el proyecto arquitectónico ya está redactado, aún debe publicarse en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) la contratación de la obra, adjudicarla a una empresa e iniciarse la construcción, que no estará concluida hasta el 2008 porque el plazo de ejecución que se prevé es de un año.

Rumbo, en declaraciones a este periódico, volvió a referirse a su desavenencia con el arquitecto municipal Santiago Murillo, de quien dijo que "se comprometió a que las obras estarían empezadas en junio del 2006 y no solo no empezaron sino que este arquitecto no hizo el proyecto".

El concejal siguió relatando que esta situación obligó al ayuntamiento a contactar con el Colegio de Arquitectos para la contratación de un equipo que redactara el proyecto. Ese trámite fue encargado al estudio de arquitectura cacereño de Luis Muriel & Luis Pineda que, tal como publicó EL PERIODICO en su edición del 15 de diciembre pasado, redactó un proyecto basado en una imagen "sólida, potente y moderna", como así lo definió Muriel, uno de sus creadores en una entrevista con este diario.

La sede de Hispanoamérica se asentará sobre una parcela de 1.008 metros cuadrados y tendrá una sola planta. Contará con cafetería, sala multiusos, salas de juntas, despachos y patios.

REACCION VECINAL El nuevo retraso de la sede ha provocado reacciones vecinales en la barriada cacereña. Los miembros más destacados de la junta directiva de Hispanoamérica se han pronunciado, incluido su presidente. Raimundo Medina manifestó ayer su preocupación por la demora y pidió al ayuntamiento más agilidad. "Reclamamos que cuanto antes empiece la obra, mejor", apuntó Medina.

El dirigente vecinal explicó que en la última reunión que mantuvo la directiva se abordó este asunto. "No tenemos claros los motivos por los que la obra no comienza y la verdad es que no sé qué decir, qué palabra idónea emplear para no molestar a nadie, pero vemos que la cosa está muy parada".

Raimundo Medina volvió a insistir en la necesidad de contar con una sede para que "la asociación de vecinos esté --dijo-- más viva y para poder hacer muchas más cosas".