La Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia (TSJEx) ha acordado la clausura de la librería Boxoyo hasta que se ejecuten las medidas que se recogen en una resolución del ayuntamiento de junio de 2006 referidas a la seguridad del edificio donde está el establecimiento. La Sala ha estimado el recurso presentado por el propietario del piso que está debajo del inmueble de la librería, ha revocado una sentencia anterior del juzgado de lo Contencioso y ha declarado nulo el acuerdo del consistorio de 11 de abril de 2008 que archivó el expediente de medidas de seguridad.
En la sentencia, que es del 18 de marzo, se recuerda que en la resolución del ayuntamiento del 19 de junio de 2006 se exigía la ejecución del refuerzo de la estructura del edificio y la presentación de un proyecto que justificase la resistencia del forjado y de la estructura del mismo.
(Este edificio cuenta con una fachada a la plaza Mayor, donde el inmueble de la librería queda en una segunda planta, y también da a la plaza del conde de Canilleros, donde está en planta baja y tiene acceso al público).
En los fundamentos de la sentencia del TSJEx se hace referencia a las observaciones de dos arquitectos y a que ambos coinciden en que el refuerzo de la estructura del edificio se debe acometer y que no se ha hecho.
La Sala toma en consideración las valoraciones de los dos técnicos, añadiendo que de ambos "lo que se deduce es que no se han tomado", según se indica en la sentencia, las medidas recogidas en la resolución del ayuntamiento de 19 de junio del año 2006. En la sentencia judicial se agrega que también se deduce de dichas valoraciones que "existe un problema de seguridad bien importante", sobre todo partiendo de la opinión de uno de ellos.
El Tribunal Superior puntualiza que en abril de 2006 se dio un plazo de veinte días para llevar a cabo las medidas que se incluían en la resolución del ayuntamiento, y recuerda que entre las actuaciones exigidas en la resolución municipal estaba que "claramente se justificase el refuerzo de la estructura para asegurar la seguridad" del edificio.
La Sala concluye que teniendo en cuenta la obligación de cumplir dicha justificación, las anteriores circunstancias ya citadas y "la situación de peligro a que se refieren los peritos", especifica en la sentencia, es procedente "acordar la clausura en tanto se resuelve sobre tales medidas".
En el fallo se puntualiza que la clausura de la librería se mantendrá en tanto no se ejecuten y verifiquen las medidas de la resolución que el consistorio dictó en junio del año 2006.
EXPEDIENTE En cuanto a la decisión del ayuntamiento de archivar en 2008 el expediente de medidas de seguridad, el consistorio lo justificaba, según se apunta en la sentencia de la Sala, en el informe de uno de los dos arquitectos y en la consideración de que, en base a su dictamen, se habían cumplido todas las medidas de seguridad que se habían propuesto en su día.
Pero el TSJEx manifiesta que lo expuesto en dicho dictamen "no puede servir para acreditar que se han cumplido las medidas de seguridad exigidas" en la resolución de junio de 2006.
(La propiedad de la librería declinó ayer hacer comentarios sobre el contenido de la sentencia de la Sala del TSJEx, aunque no se descartó que en un futuro se pueda realizar alguna manifestación sobre la misma).
