El santuario de la Montaña avanza ya en sus últimos retoques, después de casi un año de obras. Los trabajos de mayor envergadura han concluido hace unos meses y actualmente las mejoras se concentran en el refuerzo de un muro exterior. Por lo demás, solo restan tareas de limpieza y decoración del interior del templo, que será reinaugurado en este mes, una vez acaben los trabajos, que han costado 457.595 euros.

Ya han finalizado las actuaciones más urgentes que se centraban en la reforma del tejado y las goteras, causa que ha llevado al deterioro de las zonas interiores (paredes, pinturas y frescos que tienen siglos de historia); y se ha adecentado la fachada con pintura.

La empresa adjudicataria, Restaura (de Trujillo), ha decido aplicar una pintura con resinas especializadas en humedades que durará cerca de diez años. Se ha realizado también la reconstrucción del campanario que se encontraba en pésimas condiciones y la limpieza de la imagen de San Pedro.

En el exterior se ha adecentado también el camino de adoquines que sube directamente al santuario desde la última curva que da acceso al mismo, camino conocido como 'la trocha'. Era el único tramo de la zona que faltaba por arreglar porque pertenecía a la cofradía. Para ello se ha instalado una capa de hormigón y adoquinado nuevo. En el interior se han restaurado las pinturas y los frescos del camarín, limpiado los retablos y pulido el suelo. El santuario luce ya como nuevo tras tan deseada actuación.