Afectados por el fraude de la pirámide denunciaron ayer haber sufrido extorsiones para que no desvelarán el origen de la red de estafadores que opera a nivel nacional y que cuenta con amplias ramificaciones en Cáceres. Los responsables de la banda amenazaron a las víctimas con "hacerles un seguimiento" si se atrevían a hacer público el contenido de las reuniones a las que eran invitados para ser informados del funcionamiento del millonario negocio piramidal.

Según explicó uno de los afectados en Cáceres, las víctimas eran captadas para viajar a Madrid los fines de semana donde eran convocados "para un trabajo" en un restaurante de las afueras, situado en un polígono industrial ubicado entre Arroyomolinos y Fuenlabrada. "Nos metían en un salón de actos donde un tipo, con el estilo de un predicador americano, nos explicaba que se podía ganar mucho dinero con este negocio", recuerda.

DINERO FACIL

Animados por el speaker , los asistentes coreaban el nombre de la supuesta empresa denominada Cash . A continuación, les ponían como condición para participar en el negocio captar como mínimo a tres "colaboradores" más para próximas reuniones. Por cada uno de los dos primeros recibirían 600 euros (100.000 pesetas), por el tercero 1.200 (200.000 pesetas) y, a partir del cuarto, 1.500 (250.000 pesetas), siempre y cuando se comprometieran a entregar 2.700 euros (450.000 pesetas).

Anteriormente, las víctimas eran obligadas a firmar un documento en el se les pedía confidencialidad sobre el contenido del encuentro. Si al final se negaban a participar en la estafa, se les advertía con imponerles multas por desvelar el contenido de las reuniones. "Me dijeron que tuviera cuidado porque tenían gente por todas partes. Si hablaba, decían, se enterían rápido", recuerda uno de los afectados por la estafa de la pirámide .