El Museo de la Ciudad conmemora el 50 aniversario de la muerte de Pío Baroja con una exposición homenaje en la que se muestra una selección de 250 piezas, entre primeras ediciones de libros, fotografías, cartas, pinturas, y se exhibe por primera vez un documental en el que el escritor habla de Benito Pérez Galdós.

Pío Caro Baroja, sobrino del escritor dijo ayer en la presentación de la muestra que su tío era "un hombre que ha defendido la libertad y el individualismo, que ha sido fiel a sus ideas hasta la muerte, y que ha sido crítico gracias a esa independencia, cara en esta España de banderías y banderizos llena de inquietud y de rencor".

La muestra está estructurada en seis apartados que ofrecen un panorama del universo literario y vital del escritor. El recorrido arranca con la familia, infancia y juventud que reúne los primeros escenarios de su vida. El segundo apartado recrea la riqueza intelectual, literaria, artística y científica que caracterizó el principio del siglo XX y algunos de sus protagonistas, sobre los que escribió Pío Baroja. De esta etapa, en la que escribe algunas de sus mejores novelas, como Camino de perfección , La busca , Mala hierba , Aurora roja , El árbol de la ciencia , entre otras, son también los decorados que se exhiben en esta muestra procedentes de sus casas de Madrid y París.

El siguiente apartado es Tierra Vasca, un ámbito fundamental en su vida, reflejado sobre todo con la compra de su casa Itzea en Vera de Bidasoa, de la que se ha reproducido parte de la gran biblioteca. La novela histórica, una de las grandes aportaciones de Pío Baroja, también está presente a través de Memorias de un hombre de acción .

El quinto apartado recoge la etapa de la República y la Guerra, que el escritor vivió con dramatismo en su propia familia. Estuvo a punto de que lo mataran los dos bandos, motivo por el que se fue a París, de donde regresó ante la llegada de los alemanes.

El último apartado recrea la vida de Baroja desde su regreso en 1950 hasta su muerte en 1956.