En la segunda edición de Pasarela Barcelona, en enero se celebró la primera, todo parece haber cambiado. Para empezar, el nombre que abrió los desfiles no fue Antonio Miró, sino la firma TCN, que dirige Toton Comella, que presentó una coherente colección inspirada en los años 80.

Pero también ha cambiado el entorno. Montjuïc, tomado desde ayer por la feria de moda urbana Bread & Butter, ha sido reemplazado por el Port F²rum. El desconcierto marcó los instantes inaugurales de una pasarela que amplía días, diseñadores y espacios respecto a su primera edición. La organización ha habilitado dos espacios de desfiles en las dársenas del puerto. TCN tomó el mayor a primera hora con una de las mejores colecciones de baño y, cada vez más, prendas de calle de Comella.

BUSCANDO A MADONNA La diseñadora reinterpretó sus primeras creaciones y se inspiró en la Madonna de Buscando a Susan desesperadamente. Desfilaron biquinis, triquinis y bañadores remachados y estampados con rombos ingleses. El armario de Comella dio paso a esa deconstrucción de corsé que firmó Txell Miras. La diseñadora, que colabora con Neil Barret, el modista de cabecera de Brad Pitt, puso el contrapunto artístico al comercial desfile de TCN. El joven Juan Vidal abrió el espacio menor con un desfile inspirado en los internados femeninos que se leyó en clave de homenaje al Vogue de la última década.

No faltó la polémica por el anuncio de Antonio Miró de que presentaría sus colección con reclusos de la Modelo. La Asociación de Mujeres Agredidas Sexualmente manifestó su malestar por lo que considera un insulto y una humillación que desfilen presos con delitos sexuales, algo sin confirmar. Miró, que desfilará el viernes, aseguró ayer que el 85% de los reclusos tienen delitos de drogas y que los que vestirán su ropa son reclusos de tercer grado.

Mientras, en el Círculo de Bellas Artes de Madrid se celebró otro desfile en el que participó una modelo con apellido célebre. Aunque la bella Mar Saura ejerció de presentadora, fue Sabrina Serrat quien se convirtió en la estrella, el martes, de la final de la 2 Edición del Premio Brugal de Diseñadores Noveles. La modelo, de 18 años, es hija de Jaime, un primo del cantautor Joan Manuel Serrat, y vive en Londres, pero nunca había desfilado en España.