Qué panorama tan atroz el que salió a recibir el lunes a la presentadora María Teresa Campos a su llegada al aeropuerto de Palma de Mallorca. Una tormenta de verano provocó el domingo una avería en la estación de impulsión de aguas fecales de la capital, que se tradujo en un vertido de residuos en la playa de Can Pere Antoni. El desastre provocó que durante dos días la arena y el mar se llenasen de restos orgánicos. O sea, de caca.

Ya lo dijo Nostradamus (¿o fue Aramis Fuster?), podríamos evitar la mitad de las cosas que nos pasan si hiciésemos caso de las señales. Campos llegó con una amiga al aeropuerto de Son Sant Joan en busca de la tranquilidad que le robó el audímetro la pasada temporada. El misterioso artefacto que mide las audiencias televisivas (¿alguien tiene uno en casa?) precipitó la sentencia de muerte de su programa Lo que inTeresa, en Antena 3 Televisión, y ella, que fue la emperatriz de las mañanas, no quiere pronunciarse al respecto.

"Cuando llegue el momento, hablaré. Hasta entonces, espero que respetéis mi decisión de no dar entrevistas", dijo la periodista a este diario poco antes de perderse con rumbo al Poniente mallorquín. ¿Serán tormentosas sus declaraciones? La presentadora se fue en el coche de Alejandro Rubio, exmarido y padre de la hija de Terelu Campos.

La hija de la presentadora no ha acudido, de momento, a su cita anual con la canícula balear, que el año pasado visitó acompañada por otro ex, el increíble periodista Pipi Estrada.

Para la condición humana, lo que no da morbo es un estorbo. De lo contrario, no se entiende que mientras agentes de policía y voluntarios de la Cruz Roja intentasen desalojar el lunes la playa de Can Pere Antoni, los bañistas aprovechasen el menor despiste para lanzarse al agua infestada de detritos.

De la misma manera, dos grandes "amantes de la discreción" como el empresario Alberto Cortina y su esposa, Elena Cué, han vuelto a escoger para veranear una isla (esta) tomada por los objetivos. El matrimonio, eso sí, arribó en avión privado, un medio de transporte que contribuye a ir de incógnito por la vida. Cué, abogada y campeona de España de tiro al pichón, dio a luz hace cuatro meses a la primera hija del matrimonio.

Al norte, Michael Douglas y Catherine Zeta-Jones siguen atrincherados en la casa que el actor comparte en régimen de multipropiedad con su exmujer Diandra. El primer matrimonio de Douglas se rompió por la adicción al sexo del protagonista de la película Instinto básico y la pregunta que muchos se hacen aquí cuando se le ve tan feliz con su segunda esposa es: "¿Catherine se sobra y se basta?".