El Extremadura afronta el partido de esta tarde en el Nuevo Vivero como una auténtica final por su objetivo del playoff después de haber malgastado una valiosa renta de puntos en el último tramo de la temporada. Como final ha catalogado también el envite Martín Vázquez, quien anuncia sorpresas en el próximo partido, posiblemente en nombres de jugadores y en planteamientos.

En el Extremadura preocupa especialmente el estado físico de Pardo. El central no pudo hacer el último entrenamiento de la semana y su baja para hoy es casi segura. Tampoco estará Willy, lesionado y que ha pasdo por el quirófano esta misma semana. En cambio, si podría llegar Zarfino, recuperado en tiempo récord de una rotura muscular en el gemelo. Más dudas hay con Aitor. El futbolista asturiano podría forzar, pero desde el club azulgrana entienden que sería mejor reservarle para el próximo envite para así no correr riesgos innecesarios de cara a lo que se avecina.

Volverá a la portería Manu García, tras cumplir su respectiva sanción. Durante la presente semana, Nico Delmonte ha probado en el lateral izquierdo y es probable que Candelas pueda quedarse en el banquillo por primera vez en lo que va de campaña. Las buenas intervenciones de Lomotey le abren la puerta de seguir en la titularidad, mientras que otra novedad podría ser la presencia de Airam Benito en el once.

El Extremadura estará bien arropado esta tarde en las gradas del estadio Nuevo Vivero. Casi un millar de seguidores se desplazarán desde Almendralejo para empujar al equipo a una victoria que se antoja en estos momentos crucial. No será fácil, pues la estadística también juega en contra. Desde su refundación, el Extremadura nunca ganó un partido oficial al Badajoz en su estadio.