No pierde la calma el Cacereño pese al 4-1 encajado en Montijo. «Es pretemporada y nosotros empezamos más tarde que los demás. Es normal que estemos un escalón por debajo en lo físico y en más cosas», repiten una y otra vez jugadores y técnicos casi sin preguntarles por el primer naufragio, conscientes de que el resultado haya hecho que salten las alarmas. Pero obviamente es algo que tiene arreglo. Para empezar, hoy mismo con un nuevo partido de preparación con la visita a la cercana Sierra de Fuentes al Amanecer (19.45 horas).

No se trata de una cita competitiva, con puntos en juego, pero sí va a tener su peso en cuanto a imagen. Los verdes saben que no pueden permitirse otro naufragio, sobre todo teniendo en cuenta de que muchos de sus incondicionales recorrerán 14 kilómetros que hay entre ambas localidades para ver in situ a los suyos. No conviene añadirle más dudas todavía a un proyecto que ha arrancado con más dificultades económicas que nunca.

SIN FICHAJES / El Cacereño ha avanzado durante la semana, mezclando el trabajo físico con el táctico. En Montijo se apreciaron sobre todo errores a la hora de tirar el fuera de juego, algo que costó muy caro.

Es algo que se debe subsanar frente a un Amanecer que estará más rodado y que siempre suele actuar muy motivado frente al equipo de la capital. Buena parte de sus futbolistas e incluso el entrenador, José Manuel Romero, son de Cáceres. De momento, sus resultados en pretemporada no están siendo buenos: eliminación en la Copa Federación frente al Extremadura B (con un ajustado 2-1 en Almendralejo) y otra derrota hace unos días en su visita al Diocesano (2-0). También está en pleno proceso de reformulación, ya que solo mantiene a seis futbolistas de la pasada campaña y ha perdido a su gran referente tanto dentro como fuera del campo, el ya retirado Rai.

Se esperaba una semana en la que la plantilla del Cacereño creciese en cuanto a efectivos, pero solo ha tenido un alta confirmada oficialmente: la del delantero Javi Durán, que cumplirá 19 años el próximo mes de diciembre. Formado en la cantera verde, la pasada temporada estuvo en el Nervión de División de Honor juvenil. «Un orgullo jugar en el equipo de mi ciudad y contento por volver a casa. Ahora solo vale luchar por éste escudo como se merece», escribió en su cuenta de Instagram.

Operaciones como la del portero Lopito continúan paradas, aunque sí se vislumbra que se quiere hacer hueco en el vestuario, como lo demuestra lo sucedido con Dani Ollero. Con el central del Arroyo se había llegado a un acuerdo, pero se deshizo en previsión de que llegasen más jugadores en su posición.