Cuando salió la bola del Extremadura e, inmediatamente después, la del Atlético Macha Real, a la mayoría de aficionados azulgranas se le vino a la mente la fecha del 20 de junio del 2010 y el primer ascenso del equipo a Segunda División B tras la refundación. Posiblemente, el día de mayor gloria azulgrana de la última década. Nadie sabe aún cómo acabará la historia del Extremadura en esta Copa del Rey, pero desde luego el inicio no ha podido ser más romántico.

Los azulgranas se cruzarán en esta primera ronda con un viejo conocido que acaba de aterrizar en la Segunda B después de varios años de intento. La eliminatoria, a partido único, se disputará además en el Francisco de la Hera de Almendralejo, el miércoles 31 de agosto.

En este sentido, la suerte se alió con los de Diego Merino, aunque no tanto para un hipotético cruce de segunda ronda, que también quedó sorteado en Las Rozas. Si el Extremadura lograra el pase, tendría que jugar el 7 de septiembre fuera de casa ante el ganador del Cornellá-San Sebastián de los Reyes. Pero esto todavía es una hipótesis.

SATISFECHOS En el entorno azulgrana ha sentado bien el emparejamiento, no solo por un cruce que trae buenos recuerdos, sino porque la prioridad era jugar como local esta ronda. Para evitar desplazamiento y para asegurar una taquilla más. Luego está el apartado nostálgico, más para el aficionado. El único precedente de ambos equipos en Almendralejo fue precisamente en la eliminatoria del ascenso. El Extremadura ganó 4-2 en el Francisco de la Hera con dos goles de Juan Germán, héroe de la eliminatoria, y tantos de Rafa Carvajal y Javi Ramos. Luego, en tierras jienenses, el resultado fue de empate sin goles.

La última vez que el Extremadura jugó Copa del Rey fue el 4 de septiembre del 2013. En aquella primera eliminatoria jugada en el estadio azulgrana, el Albacete apeó al equipo por entonces dirigido por Diezma por 1-2.

EL RIVAL De aquel Atlético Mancha Real de hace seis años apenas queda nada. El club jienense está muy renovado, empezando desde el banquillo, donde comandados por Juan Arsenal han logrado el salto a la categoría de bronce. Su buena temporada ha sido premiada en el plantel con hasta trece renovaciones. Del año pasado, como porteros están Emilio Muñoz y Pedro Barrios. Rubén Peces, Ramón y Linares como defensas; Manolillo, Rivera, Albertillo, Cervera y Pedrito como centrocampistas; y Sergio Paredes, Angel Gómez y Elady como delanteros.

El Mancha Real tiene seis nuevos refuerzos: Manuel León, lateral zurdo que llega de la Balona; José Manuel Gómez, central del Zamora; Airam Benito, del Lorca FC; Zárate y Monteiro, que llegan del Portugalete; y Borja Romero, el más conocido por la afición extremeño por su paso por el Mérida el pasado año.

El conjunto verdiblanco empezó a trabajar el pasado lunes, una semana más tarde que el Extremadura. Será rival de los azulgranas también en liga, pero para abrir boca, rememorarán un duelo de recuerdos desiguales para ambos en el estreno en Copa del Rey. Un emotivo cartel para arrancar la competición donde los pequeños sueñan con hacerse grandes. El espejo más cercano en el que mirarse es el Villanovense, que la temporada pasada tuvo la suerte de enfrentarse al Barcelona. Para llegar a ese punto hacen falta varias eliminatorias. Pero solo andando se hace el camino.