El equipo de Estados Unidos se aferra a la tenue posibilidad de remontar el 2-0 del primer día, tras el acopio de moral que le regaló ayer el doble de los gemelos Bryan. Sólo una vez en finales de Copa Davis se ha producido tan espectacular reacción, y EEUU fue entonces víctima. Fue en 1939 cuando, en los dos días finales, Australia le dio la vuelta al marcador.

El capitán norteamericano, Patrick McEnroe, se aferraba ayer a la posibilidad de la victoria mostrando una confianza ciega en su número uno, Andy Roddick, y suponiendo una gran capacidad de reacción de su número dos, Mardy Fish, derrotado claramente el viernes por Moyá. "Andy tiene todas las posibilidades de conseguir la victoria, y Mardy aprende rápido. Si nos ponemos 2-2 será complicado, pero Mardy puede conseguirlo", aseguró ayer el hermano del legendario John.

Opciones abiertas

Un planteamiento que, desde luego, no era compartido por el equipo de capitanes españoles, que esperan sentenciar ya la final en el primer partido del día, el que en teoría debe enfrentar a Roddick con Moyá. "El que salga hoy contra Roddick será mejor que él en tierra", aseguró el portavoz del G-3, Jordi Arrese, dejando en el aire un improbable cambio de alineación en el último momento, algo que ha sido habitual en Sevilla. "Tras el doble, tenemos todas opciones abiertas --explicó Arrese--. En realidad somos un equipos de cuatro individualistas que hacen el esfuerzo de jugar el doble. No queríamos gastar todos los cartuchos el segundo día".La idea española es sentenciar la final en el primer match ball contra Roddick. "Nunca le había visto tan cansado y acalambrado como al final del partido del viernes contra Nadal", aseguró Arrese. El punto de vista estadounidense era ayer otro. "Obviamente, no somos los favoritos, pero tenemos la posibilidad de batir a los españoles. Lo creíamos el viernes, los creemos hoy y lo creeremos mañana", aclaró McEnroe. "No hay razón para salir sin creer en la victoria". Tommy Robredo le echó un cable a Arrese.

"Nunca le había visto tan cansado y acalambrado como al final del partido del viernes contra Nadal", "Obviamente, no somos los favoritos, pero tenemos la posibilidad de batir a los españoles. Lo creíamos el viernes, los creemos hoy y lo creeremos mañana", "No hay razón para salir sin creer en la victoria". "Poder ir a dormir con un 2-1 es positivo".Protagonismo realLos prismáticos volvieron a ser ayer el objeto más codiciados por el público de La Cartuja. Los jugadores tuvieron esta vez un duro competidor. "¡Sus Majestades!", como identificaron por megafonía a Felipe y Leticia, presentes en ayer en Sevilla. "Qué abrigada viene", "qué delgada está" y

"¡Sus Majestades!""Qué abrigada viene", "qué delgada está" "es más bajita de lo que parece"