Resignado a que no queda otra opción para el Mérida que «ganar y esperar» que el Recreativo de Huelva venza en Cartagena si quiere jugar los playoff de ascenso, llegaba el entrenador emeritense, Eloy Jiménez, a su última comparecencia previa a un partido en la liga regular.

Repitió varias veces la frase de «ganar y esperar», sobre todo porque como «no ganemos y falle el Cartagena, nos cuelgan a todos». También reconoció que hubo jugadores «llorando en el vestuario después del partido del domingo. El miércoles fue un día complicado, pero poco a poco se han ido animando y estamos concienciados».

Aunque el empate en El Ejido complicó aún más la clasificación para el Mérida porque «si llegamos a ganar, la película cambia», reconoce el míster romano que «el partido clave fue el de Córdoba (perdió el Mérida 1-0), porque en la primera parte debíamos haberlo dejado liquidado».

Con las bajas por lesión de Hugo Díaz, Dani Fernández y Migue Marín, encarará la última jornada el Mérida para ganar a La Roda mañana (18.00 horas). «Pase lo que pase, yo estoy súper orgulloso, contento y satisfecho de estos jugadores, y creo que la afición, en líneas generales, también debe estar contenta con la temporada que hemos hecho», afirmó de forma taxativa el técnico manchego, cuyo futuro en el club todavía es una incógnita pues «tengo que hablarlo con mi familia, pero no voy a tardar en decidir».

A pesar de que el Cartagena es claro favorito para ganar su partido frente al Recreativo porque los locales se juegan la temporada mientras que los visitantes ya la tienen salvada, lo cierto es que bajan las aguas revueltas por el Cartagonova después de cosechar cuatro jornadas consecutivas sin ganar. Otro problema para el Mérida es que ni siquiera el empate le vale.