Roger Federer terminó con el maleficio que arrastraba cada vez que acometía la conquista del torneo de Basilea, el de su ciudad natal, y consiguió su undécimo título de la temporada y el número 44 de su carrera al imponerse al chileno Fernando González (6-3, 6-2 y 7-6 (3)). Olvidados los apuros padecidos en las semifinales, donde Federer se vio contra las cuerdas en el choque frente al tailandés Paradorn Srichaphan, que estuvo a dos puntos de lograr el triunfo, ventiló con la misma soltura que hace una semana en Madrid el compromiso contra el mismo rival que ayer.

No consigue el tenista de Santiago sacar brillo a una buena actuación. Cada vez que se ha encontrado en la orilla de ampliar su palmarés ha coincidido de frente con el número uno del mundo, con el que ha perdido en los nueve duelos que ha disputado.

MARCAS Sigue batiendo récords el helvético, que sumó en su casa el undécimo título del curso. Ha igualado ya sus registros del 2004 y el 2005. Y enfila ahora el Masters Series de París y la Copa Masters de Shangai para ampliar sus registros. Este año ya totaliza 86 victorias, 23 consecutivas desde que perdió frente al británico Andy Murray en la segunda ronda del Masters Series de Cincinnatti. Su historial está inundado ya con 44 títulos, uno menos que el austríaco Thomas Muster.