Un Extremadura Arroyo muy gris, a excepción de la central brasileña Flavia Lima, que disputó un gran partido, perdió ayer ante el Barça por 1-3 (22-25, 25-17, 18-25 y 17-25), en una nueva jornada en la que la pobre recepción del cuadro le ha impedido hacerse acreedor de un resultado más satisfactorio para sus intereses, y de subir puestos en la clasificación.

Además de la paupérrima imagen que el equipo dio en recepción, dos de sus integrantes, Gala Clemente y Belinda Sánchez, volvieron a evidenciar que su estado de forma dista mucho del nivel exhibido a comienzos de temporada.

Por su parte, el cuadro catalán, sin hacer ningún alarde y contabilizando también muchos errores no forzados, sí supo demostrar un poco más de empaque en su juego para llevarse un partido que después de su negativa racha de resultados, conlleva un fuerte efecto balsámico.

El comienzo del partido fue un reflejo de lo que acontecería más tarde en el resto de juegos, con una escuadra local que saltó muy fría a la pista del Complejo Deportivo Nuestra Señora de la Luz. El triunfo en esa manga fue para las catalanas. En el segundo set el Arroyo tuvo en Flavia a su mejor jugadora y se impuso, aunque en el tercer parcial el equipo barcelonés volvió a aprovecharse de la inseguridad local, lo mismo que hizo en el cuarto set.