Seguramente, conforme se vayan arrancando jornadas del calendario, se pensará que la siguiente es la más importante que se va a disputar a los largo de las siete que aún falta. Muy importante fue la victoria del Mérida hace una semana en Jumilla porque ganaron todos los rivales directos y supuso mantenerse en la pelea por estar entre los cuatro primeros. Sin embargo, más allá de la trascendencia de cada jornada, da la sensación de que ésta es clave para las aspiraciones del Mérida, porque es en la única de aquí a final de temporada en la que se van a enfrentar de manera directa los cuatro equipos que están por encima en la clasificación entre sí (Melilla-Villanovense y Marbella-Murcia). De ahí que el Mérida tenga que ganar hoy en el Romano (18.00 horas) para recortar puntos, como mínimo, a dos de los cuatro equipos. Eso sí, lo ideal sería que hubiera dos empates.

Pero lo primero que tiene que hacer el equipo emeritense es ganar. Por eso, todas las cábalas y cuentas que se hacen hasta final de temporada pasan porque a los locales no se le escape ningún punto de sus partidos en el Romano. Hoy tiene el primero ante el Linense del extremeño Julio Cobos, seguramente el entrenador rival que más veces ha visto en directo al cuadro emeritense.

Para este encuentro, Eloy Jiménez dispone de todos sus futbolistas, a excepción del sancionado Raúl Bernabéu. Como es habitual, el entrenador del Mérida no ha dado ninguna pista sobre el posible once que pondrá en liza, aunque sí ha destacado un aspecto del juego que para él es clave a estas altura de campeonato: las jugadas a balón parado.

balón parado / Para el técnico romano «a veces se genera más peligro en este tipo de jugadas que con el propio juego, de ahí que sea importante dominarlas, tanto defensiva como ofensivamente». En este sentido, se podría pensar que el técnico quiera introducir los máximos centímetros posibles en su once titular, por lo que podría haber dos variaciones con respecto a la semana pasada, que supondrían la vuelta de Javi Chino al doble pivote en detrimento de David Álvarez, así como volver a ver a Yacine, tras cumplir su partido de sanción, junto a Diego Cascón, que hacen una pareja más corpulenta en ataque que con Hugo Díaz.

Álex Bernal se mantendría partiendo desde la banda derecha, pero con libertad de movimientos, y la duda es quién ocupará la banda izquierda, si Óscar Rico o Hugo Rodríguez, los dos jugadores más importantes de la plantilla en el lanzamiento de las jugadas a balón parado.

Por su parte, la Balona llega con dos bajas en defensa, Olmo, que tiene fracturados dos dedos de un pie diciendo prácticamente adiós a la temporada, y Rafa Navarro, cedido por el Mérida, que no puede jugar por contrato contra el equipo emeritense.

Ofensivamente es un equipo muy bien dotado. Los mayores problemas los tiene en la parcela defensiva, algo que ha mejorado Julio Cobos desde su llegada. Para el cuadro de La Línea de la Concepción este no es un encuentro clave, pues, aunque lógicamente quiere refrendar lo antes posible su permanencia, lo cierto es que tiene un colchón de seis puntos con respecto a la promoción de descenso y al descenso directo.

Se prevé un buen ambiente en el estadio emeritense gracias a la promoción de dos por uno.