Cortada la racha negativa, el Cacereño tiene hoy una prueba de máxima exigencia en el Ramón de Carranza (17.00 horas), donde visita a un Cádiz eufórico tras su clasificación a los dieciseiavos de final de la Copa del Rey, donde se medirá al Villarreal. El triunfo en el derbi ha permitido al conjunto verde disfrutar de una semana algo más tranquila, "con muy buen ambiente", que hoy debe traducirse en un juego con menos presión ante un rival que podría acusar el desgaste del partido del miércoles en el torneo del 'ko' ante el Linense.

El paso firme del Cádiz en Copa no se traslada a la liga, donde las dudas invaden al equipo "con más presupuesto", del grupo, como recuerda Aitor Bidaurrázaga. "El Cádiz tendrá un subidón por la victoria en la Copa, pero este año en la liga no está muy bien. ¿Presión para el entrenador? Como siempre, el año pasado se cargaron a Acné estando en promoción", añade el técnico vasco, que se declara "predispuesto para ir a por todas al Ramón de Carranza", donde el Cacereño arrancó la temporada pasada una importante victoria tras remontar en tres ocasiones un resultado adverso (3-4).

El triunfo del pasado domingo no ha permitido al Cacereño abandonar la última posición del grupo, aunque ya solo una victoria le separa de posiciones menos peligrosas. Sin bajas ni altas nuevas esta semana, el CPC acude al estadio gaditano con la máxima ambición. "Ir a ganar siempre, aunque ya veremos qué pasa, pero la mentalidad es la de ir a por los tres puntos".

Sabe Bidaurrázaga que aunque no acabe de carburar en liga, el Cádiz es un "equipazo, sobre todo delante, con Jona, Villar, Airam...". No preocupan los problemas en liga al técnico gaditano, Antonio Calderón. "Ya dije que el partido de Copa venía bien que nos llegara tan pronto porque conocía muchos casos en los que no se está bien en la liga, llega el de Copa, se saca un buen resultado y se recupera la confianza. El partido del miércoles nos ha dado moral para lo que nos viene". Y lo que le llega es un Cacereño que irá a por todas.