PORTUGAL: Ricardo, Meira, Miguel (Paolo Ferreira, m.62), Carvalho, Caneira, Tiago, Maniche, Petit, Figo (Boa Morte, m.80), Simao y Helder Postiga (Nuno Gomes, m.69).

MEXICO: Oswaldo Sánchez; Márquez, Salcido, Osorio, Rodríguez (Naelson, m.46), Pineda (Castro, m.69), Méndez (Guillermo Franco, m.80), Pardo, Luis Pérez, Fonseca y Bravo.

GOLES: 1-0.m.6, Michel; 2-0.m.24, Simao en penalti; 2-1.m.29, Francisco Fonseca.

ARBITRO: Lubos Michel (Eslovaquia). Amonestó a los portugueses Miguel, Maniche, Boa Morte y Nuno Gomes y a los mexicanos Rodríguez, Pérez (dos), Márquez y Zinha.

Portugal se proclamó como el mejor del grupo D del Mundial al vencer a México, que se clasificó para los octavos de final con sufrimiento gracias al empate a uno de Angola con Irán.

Portugal controló y contuvo a unos mexicanos que dejaron mucho que desear. Los goles de Maniche (m.6) apenas empezado el partido y de Simao (m.24) le dejaron como el mejor del grupo.México se hizo la vida imposible; tuvo el empate en un penalti y la voló por los aires y sólo descontó con un gol de Francisco Fonseca (m.29).

Los mexicanos perdieron por fallos propios, por dejar hacer a Portugal y por una defensa que estaba demasiado cargada al centro y que abandonó los laterales, donde Petit, Tiago y Michel hicieron de las suyas.

Sólo hubo destellos del lado mexicano y más regularidad en el lado de Portugal, que aprovechó los espacios para abrir el marcador y aumentarlo con el regalo de Márquez, que tuvo fallos impropios de su categoría.

El duelo del delantero Omar Bravo con el defensa Fernando Meira también fue intenso y el mexicano batalló sin descanso para hacerse notar en el ataque.

MAL INICIO Arrancaba el partido cuando un descuido le costó a México verse prematuramente abajo en el marcador. Simao se les metió por la izquierda, se detuvo, se quitó la marca y sirvió al espacio donde Maniche remató a placer, desde el punto de penalti, arriba a la derecha.

Los de México se esforzaron por regresar al partido y dos minutos después (m.8) tocaron la puerta de Portugal con un remate desviado de Bravo, pero Portugal aprovechó la ola para hacerse con el dominio del campo.

Había muchos minutos por delante y México tenía que remar contra la corriente ante un Portugal que esperaba el momento de pegar otro latigazo.

Pero todos abrieron la boca por el error de Rafael Márquez, quien cometió una mano en el área que fue castigada como penalti y convertida por Simao.

En la segunda parte, México fue otro. El equipo fue a más y generó más expectativas de gol, hasta provocar un penalti a su favor en una mano del portugués Miguel. Omar Bravo, el goleador mexicano con dos tantos en este Mundial, disparó por encima de la portería.

Entonces el mundo se le vino encima a México con la expulsión de Luis Pérez por una segunda amarilla por fingir una falta dentro del área de Portugal. Y la última media hora, a sufrir los mexicanos. Trataron de cerrar la defensa y buscar una genialidad de Fonseca o de Bravo, que no pudo lavar el error del penalti.