El entrenador del Mérida, Medhi Nafti, se mostró convencido de que su equipo, a pesar de la derrota, había mejorado «en muchos aspectos» con respecto a anteriores desplazamientos, pero recordó en varias ocasiones que su equipo lleva «tres partidos sin hacer gol». «Nos quedamos con caras de tontos viendo el resultado, cuando hicimos el mejor partido fuera de casa y estuvimos intensos, porque hicimos todo bien, excepto en las dos áreas, que lo es todo, porque es donde se deciden los resultados», lamentó. «Hubo muchas cosas positivas, pero el resultado es el que manda». Nafti entiende que el 1-0 «justo antes del descanso» condicionó a su equipo. «Y ya en el segundo tiempo no acabamos una jugada y a la contra la jugada acaba con un gol extraordinario, una vaselina... y para dentro». Mientras, Julio Cobos, entrenador de Linense, se confesó «muy contento» con la victoria y recalcó que el fútbol estaba en deuda con su equipo tras los dos últimos empates. «Tuvimos el acierto que otra veces nos faltó», dijo el preparador extremeño.