Plasencia y Aracena disputan a las siete de esta tarde el segundo partido de las eliminatorias por el ascenso a Liga LEB. Es el quinto duelo particular entre ambos rivales, con cuatro victorias para los catalanes. Esta abrumadura estadística ha generado un cierto desánimo en el hasta ahora eufórico entorno placentino, mientras que el equipo de Ñete Bohigas intenta huir de ello y relanzarse en las series.

El equipo local buscará frenar las armas principales del Aracena: la fortaleza de Robertson bajo los aros, el tremendo acierto anotador de sus aleros Deveaux y Johnson y su potente juego colectivo.

La superioridad del banquillo visitante está condicionando claramente todos los encuentros. El Plasencia tiene menos recursos y además está sufriendo que a su director de orquesta, Carles Canals, se le esté tapando muy bien. En su lugar, Fran Robles está resultando un recambio práctico. Ñete Bohigas también se está resintiendo de la baja aportación de Juanmi Morales, que sólo logró once puntos el jueves.

ESPERANZA

La idea del Plasencia irse hacia Cataluña con el empate a una victoria para intentar lograr la machada en Ponts, recuperar el factor campo y forzar el quinto encuentro en Extremadura.

Se espera que el público de Plasencia vuelva a acudir en masa para animar incansablemente a su equipo. La expectativa generada después de ser campeones de la liga regular y subcampeones de copa está resultando alta.