WASHINGTON. Dos detalles de enorme calidad de Ronaldinho y la velocidad de Quaresma, los jugadores que encarnan la apuesta ofensiva del nuevo Bar§a, sirvieron al conjunto de Frank Rijkaard para derrotar al Milan (2-0).

Con un claro esquema de 4-2-3-1, una defensa adelantada, un centro del campo presionante y con juego de extremos, el equipo catalán volvió a mostrar pinceladas de una vocación ofensiva.

Ronaldinho, en la imagen, dio el pase del 1-0 y marcó el segundo con la colaboración del central del Milan Roque Junior, en quien el balón rebotó tras un envenanado disparo del mediapunta brasileño.