Lluvia, viento, barro y un podio. La selección femenina absoluta dio la gran alegría a Extremadura en el Campeonato de España de cross individual y por autonomías, disputado en el Circo Romano de Mérida. Consiguió la plata y estuvo muy cerca de un oro que se escapó en la última vuelta a un circuito cuyas condiciones se endurecieron notablemente por la climatología.

A nivel individual, Teresa Urbina concluyó sexta en esa carrera y Houssame Benabbou fue octavo en la competición absoluta masculina. Buenos puestos si se tiene en cuenta que la preparación de ambos está encaminada al Mundial de media maratón que se disputará en Valencia dentro de dos semanas. Unas 3.000 personas --hubieran sido más de aparecer el sol con un poco más de continuidad-- les aplaudieron a rabiar en un escenario mítico.

A Urbina, casi sin resuello, se la notó muy dolida por la resolución que había tenido la mañana para ella. Se batió el cobre en la lucha por la cuarta posición, que hubiera supuesto un avance considerable en las aspiraciones extremeñas, pero terminó sexta.

«Esperaba estar más arriba, pero se me ha hecho muy duro, con este viento, que siendo tan alta me da por todos los lados. Me he dejado el 120% y he peleado hasta el final», contaba pocos minutos después de cruzar la meta en una carrera que dominó de cabo a rabo Trihas Gebre, la nacionalizada que se paseó para lograr su cuarto título nacional.

«Es que no he ido a gusto. Estaba todo muy resbaladizo. Esperaba alguna zona menos blanda para correr más», seguía lamentándose la zoriteña.

Más contenta pareció acabar una de sus compañeras, Cristina Jordán, vigesimosexta. Contabilizó como la cuarta extremeña en sumar puntos junto a la propia Tere Urbina, Tania Carretero (novena) y Raquel Gómez (decimoquinta). Sonia Bejarano estuvo por debajo de lo esperado con su vigesimonoveno puesto. Macarena Muñoz completó el sexteto de plata (76ª).

EN POSITIVO / «Los demás equipos también eran muy buenos. El oro era demasiado ambicioso. Nos ha faltado poco. Sabíamos que iba a estar muy reñido. La plata me sabe muy bien. Es un gran éxito. y es un lujo correr en casa. Te anima todo el mundo», afirmaba Jordán, campeona de Europa sub-23 en 2010 y que ahora recupera sensaciones después de una larga época de problemas físicos.

El equipo masculino absoluto concluyó séptimo, más o menos en las previsiones, con Houssame Benabbou como referente. Su octavo lugar también le dejó feliz teniendo en cuenta que también entrena habitualmente sobre terreno firme con vistas al Mundial de Valencia. Estuvo adelante, pero su parte final no fue tan buena como esperaba. «Hubo un momento el que me he visto en el podio. Quería conseguir medalla, pero no ha podido ser contra atletas que preparan específicamente este campeonato. No son cojos», espetó, dejando claro que lo va a «hacer bien» en la gran cita de la media maratón.

El vigesimosexto puesto de Ricardo Rosado es lo siguiente que se encuentra entre los extremeños, que también contabilizaron el 54º de Miguel Ángel García, el 58º de Mario Mirabel, el 66º de Aitor Sánchez y el 90º del hermano de Houssame Benabbou, Rachid.

Venció otro nacionalizado, Ayad Landassem. Es su tercera vez, aunque los pronósticos señalaban en mejor forma al aragonés Toni Abadía.

HUECO GENERACIONAL / Al cross extremeño se le avecina un futuro no tan brillante como su presente: se está creando un hueco generacional entre los actuales referentes y los chicos que empiezan.

Los discretísimos resultados en las categorías sub-23 y sub-20 lo confirman. En la primera de ellas la mejor chica fue Rakel Casado (57ª) y el equipo no llegó a completar las cuatro atletas necesarias para puntuar, mientras en la masculina Raúl Parra alcanzó el 37º y Extremadura concluyó undécma. En sub-20, María Jesús Domínguez fue 30ª y Manuel Petrón, 50º, con sus selecciones en el furgón de cola (undécima y decimoquinta, respectivamente).