Definitivamente habrá Alta Velocidad entre Badajoz y Madrid, pero el año de su entrada en funcionamiento sigue siendo una incógnita. La ministra de Fomento, Ana Pastor, presentó ayer el nuevo Plan de Infraestructuras, Transporte y Vivienda (Pitvi), que recoge todas las actuaciones pendientes del anterior plan, y que tiene su horizonte en el año 2024. Pero ni ella ni el presidente de la Junta de Extremadura, José Antonio Monago, concretaron la programación anual ni la fecha en la que se prevé concluir las obras.
La titular de Fomento se limitó a decir que el próximo mes de julio el Consejo de Ministros aprobará el plan definitivo y su ejecución plurianual. Por su parte, el jefe del Ejecutivo regional destacó el compromiso del Gobierno con el AVE extremeño.
Según Pastor, "el tiempo de las obras faraónicas y de los convenios sin dinero, ha terminado", echando en cara al anterior ministro, José Blanco, que hiciera una programación ficticia a sabiendas de que no había presupuesto para poder ejecutar muchas de las obras recogidas en el anterior plan, el PEIT.
En su comparecencia ante la Comisión de Fomento del Congreso, Ana Pastor enumeró las actuaciones pendientes y señaló que el AVE Madrid-Lisboa, a su paso por Extremadura, estará dotado para su terminación con 2.651 millones de euros. Ese dinero provendrá de las aportaciones del Estado, de fondos europeos y de capital privado.
Este anuncio de la ministra es para Monago "una buena noticia", si bien reconoció que no puede facilitar una fecha para la entrada en funcionamiento del AVE. "Hay que ver la temporalización que se hace, pero si en ocho años de Gobierno socialista se certificaron 300 millones, aún en el peor de los escenarios, que es el 2024, si se certifican 2.650, hagan una regla de tres y verán que la apuesta es como ocho veces mayor que la que hizo el anterior Gobierno de España", indicó.
El jefe del Ejecutivo ya señaló hace un mes, tras reunirse con la ministra, que la finalización de las obras estaba condicionada a las disponibilidades económicas del Gobierno, que avanzó eran escasas en estos momentos de crisis. Este planteamiento chocaba con sus exigencias durante la campaña electoral de que el AVE era una prioridad para el PP y que Rajoy sería sensible a las demandas extremeñas. Ahora, señaló en enero, la prioridad de la Junta es la mejora del tren convencional.
Monago fue muy crítico con el anterior titular de Fomento, e indicó que "el ministro Blanco, que Dios lo tenga en su escaño de la oposición. Me enfada bastante Blanco, porque me engañó como un chino con el Eje-16. Y como agua pasada no mueve molinos, no voy a pelearme con el ministro Blanco; ya bastante tenemos".
CRITICA SOCIALISTA
Por su parte, el portavoz socialista en la Asamblea, Valentín García, señaló que Monago es el presidente autónomico del Partido Popular "más sumiso" con el Gobierno, y que esta inversión del AVE es la que ya estaba fijada en el anterior plan de infraestructuras. "Rajoy es un Gobierno sin para Extremadura, sin inversiones, sin renovables y sin AVE".
García recordó que el contrato público-privado que iba a sacar el anterior Gobierno era por el valor ahora anunciado, y advirtió que van a exigir máxima celeridad a Rajoy para que saque de una única vez todo lo que falta del AVE, "porque fiarlo al 2024 es condenar a esta región al ostracismo".
Para el portavoz de la coalición IU, Pedro Escobar, el anuncio de la ministra "no le entusiasma" si es el el horizonte del 2024, ya que hasta entonces Extremadura "no puede estar con vías sin tren y trenes sin pasajeros".
De los 19 tramos en los que está dividido el trazado del AVE en Extremadura, ahora mismo hay 12 en obras y siete están a la espera de licitación, una vez concluida la redacción de sus proyectos. Fuera de la región, el tramo de Oropesa a Pantoja (donde enlazaría con la línea Sevilla-Madrid), está en fase de redacción de proyectos por parte del ministerio.
Las obras están más avanzadas en el tramo entre Cáceres y Badajoz, pero de la capital cacereña en dirección a Castilla-La Mancha, solo está adelantado el tramo Cáceres-Casar de Cáceres.
A esto hay que unir que todavía están en fase de estudio o redacción de proyecto los accesos a Plasencia, Cáceres, Mérida y Badajoz. Incluso en la capital cacereña sigue sin concretarse la ubicación definitiva, dado que aún no hay acuerdo entre ayuntamiento y ministerio sobre el lugar idóneo para construirla.
La adjudicación de todas las obras de la Alta Velocidad de Badajoz a Madrid deberían estar en marcha si el ministro socialista José Blanco hubiera cumplido la promesa realizada en septiembre del 2010 de sacar antes de finalizar la anterior legislatura un macroconcurso para el AVE. Pero lo único concreto es que la documentación se remitió al Boletín de la Unión Europea y finalmente, ante la petición del nuevo Gobierno del PP de paralizar cualquier adjudicación, todo quedó en stand-by .
Entre tanto, Portugal continúa sin concretar si finalmente hará su tramo de Alta Velocidad entre Lisboa y Caya, o si únicamente utilizará ese enlace como vía rápida para poder transportar pasajeros y mercancías.
