La Junta de Extremadura instó al Gobierno de España a que se suscriba un pacto de Estado contra la violencia machista para poner fin a esta lacra que trasciende a las propias comunidades autónomas y supone un "problema de Estado".
Así lo manifestó en Mérida la directora del Instituto de la Mujer de Extremadura (IMEX), Elisa Barrientos, quien asistió al minuto de silencio que se guardó en las puertas del Ayuntamiento de Mérida en memoria de las últimas víctimas de violencia machista.
Barrientos explicó, además, que los minutos de silencio son en parte para transmitir la "más profunda repulsa" a este tipo de actos y el más sincero "pésame" a las familias, pero son también un momento "reivindicativo" para que todas las administraciones no permitan que "vuelva a fallecer ninguna mujer por violencia de género".
El acto contó también con la presencia, entre otros, de la consejera Portavoz y responsable de Relaciones Institucionales de la Junta de Extremadura, Isabel Gil Rosiña; la consejera de Hacienda y Administración Pública, Pilar Blanco Morales; y la portavoz municipal del Ayuntamiento de Mérida, Carmen Yañez; junto con representantes de los grupos del PP, Mérida Participa y Ciudadanos.
La concejala delegada de Igualdad de Género del Ayuntamiento de Mérida, Ana Aragoneses, denunció el aumento de "feminicidios" debido al "machismo patriarcal". La portavoz municipal del PP, Raquel Bravo, mostró su "pésame a los familiares" ante lo sucedido y se quejó de que el equipo de gobierno no les haya convocado al acto. El portavoz de Mérida Participa, Ramón Carbonell, afirmó que el "terrorismo machista" es una de las lacras más importantes de España. La portavoz de Ciudadanos, María Antonia Sanmartín, expresó su deseo de que este tipo de actos "no se repitan".
En la Diputación de Cáceres también ocurrió lo mismo. El vicepresidente primero, Fernando Grande Cano, manifestó el "rechazo más absoluto, la repulsa y condena más enérgica" contra este tipo de violencia. La Federación de Municipios y Provincias de Extremadura (Fempex) y los ayuntamientos de Badajoz, Don Benito y Villanueva de la Serena, también hicieron lo mismo.
