La Fiscalía de Extremadura subraya en su memoria de 2013 la "dificultad" que existe para culminar los procesos relacionados con los delitos de corrupción, que "van ganando en importancia y cada vez preocupan más a la sociedad". "La justicia en general, y la extremeña en particular, parece que no es capaz de dar respuesta a unos fenómenos delictivos especialmente reprochables", añade el informe, que fue presentado ayer en el Parlamento regional por el fiscal superior de Extremadura, Aurelio Blanco.

Blanco explicó que son procedimientos largos y complicados que y la región no cuenta con fiscales especializados, al no tener una sección de Anticorrupción. A ello se une que los órganos judiciales especializados en que recaen estos casos están de por sí saturados. No obstante, recalcó que la corrupción no es "alarmante" en Extremadura. Dentro del apartado de Administración Pública, el informe cita como figuras más representativas prevaricación, cohecho, malversación de caudales públicos y tráfico de influencias, los delitos asociados a la corrupción.

En relación al primero, la Fiscalía de Badajoz registró en 2013 un total de 138 diligencias previas que finalmente dieron lugar a solo tres escritos de acusación y una sentencia condenatoria. En Cáceres se incoaron 35 causas frente a las 51 de 2012, de las que 28 fueron calificadas y 20 en sentencia. Las acusaciones se plantearon por prevaricación en cuatro procedimientos. La memoria de Cáceres apunta a la desobediencia cometida por autoridad o funcionario público como el tipo más común de esta serie de figuras, con 18 acusaciones y sentencias recaídas. A este respecto, la Fiscalía advierte de que "llama la atención observar cómo las autoridades y los funcionarios, que son los más directamente conminados por la ley a cumplir las resoluciones judiciales, sean reticentes a ello o lisa y llanamente las incumplan".

Sobre el resto de procedimientos, Blanco explicó que el número se ha mantenido estable con respecto a los años anteriores, aunque sí ha expresado su preocupación por la subida de los relacionados con la libertad sexual y contra los menores en las redes sociales.

CATALUÑA Blanco también se pronunció sobre la polémica surgida en torno a la consulta catalana, considerando que si los fiscales de la sala del Tribunal Supremo han apoyado la presentación de una querella, será porque "habrá fundamento suficiente para utilizarla". "Por lo menos una duda suficiente para plantearla ante los tribunales de justicia", agregó.

Blanco ha precisado que desde la Fiscalía Superior de Extremadura "ni se apoya ni se deja de apoyar" la querella y ha recordado que esta no conoce los términos en los que va a ser redactada. No obstante, la Fiscalía extremeña sí apoya el procedimiento que se ha utilizado para resolver "el conflicto" entre la Fiscalía de Cataluña y el fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, un modo de resolución, ha dicho, previsto en el Estatuto.