Quienes abogan por su prohibición insisten en que los animales (elefantes o grandes felinos) son castigados a diario para que aprendan los distintos trucos que forman parte del espectáculo. Aseguran que son entrenados con látigos, barras de metal con puntas de gancho o descargas eléctricas. E incluso se les niegan la comida. Y, cuando no entrenan o actúan, pasan la mayor parte del tiempo en aislamiento, encadenados o enjaulados en espacios mínimos. Por el contrario, quienes defienden su continuidad alegan que el maltrato forma parte del pasado y que, si hay casos, son muy puntuales. Y recalcan que sin estas exhibiciones la rentabilidad del negocio correría serio peligro, por lo que, quizá, supondría su desaparición (en España hay unos treinta circos y emplean a unas 2.500 personas). De hecho, han pedido al Ministerio de Cultura (incluso en una manifestación) no solo que apoye estas prácticas, sino que las blinde con una ley nacional, al igual que se ha hecho con los toros. Son las dos posturas opuestas frente a la existencia o no de espectáculos con animales en los circos, un debate que en varias regiones está actualmente sobre la mesa.

En la Junta de Extremadura tienen clara su posición. Bajo el argumento de que «hay sufrimiento» y en pro de «una política que quiere seguir avanzando contra el maltrato animal», desde la Consejería de Medio Ambiente y Rural, Políticas Agrarias y Territorio se va a proponer la prohibición de este tipo de espectáculos. Hay municipios extremeños que ya han tomado la iniciativa por su cuenta (son Mérida, Guareña, Villanueva de la Vera, Castuera y en breve se unirá Villanueva de la Serena), pero ahora desde la Administración regional quieren que la medida se aplique a toda la comunidad y convertirla así en una de las «pioneras» en España.

De este modo, la Junta trabaja ya en un borrador (que se espera esté listo «lo antes posible») que vendrá a modificar la Ley de Espectáculos Públicos, donde se incluirá el veto de los circos con animales en todas las localidades extremeñas, según confirma Nieves Esteban, secretaria general de Política Territorial y Administración Local de la Consejería de Medio Ambiente. «Aún estamos perfilando la futura normativa, pero nuestra consideración es que no hay un buen trato, que sí sufren y que debemos eliminar estos espectáculos de nuestros pueblos y ciudades», manifiesta Esteban.

SER ZONA LIBRE / Una vez terminado el texto, éste se llevará a la Asamblea de Extremadura donde, para que salga adelante, el PSOE tendrá que contar con el apoyo de otros partidos si quiere que la nueva normativa vea la luz. Si así ocurre, la región será declarada zona libre de espectáculos circenses con animales salvajes.

La polémica sobre el maltrato en estos escenarios volvió a la actualidad el pasado mes de febrero cuando el Ayuntamiento de Madrid inició los trámites para la prohibición. Si prospera esta iniciativa, se sumaría a la ley catalana, la cual recibió luz verde en el año 2015 y se convirtió así en la pionera en España con carácter autonómico.

Además, el pasado jueves Galicia también anunció que se une a esta eliminación con una normativa regional después de que varios municipios hayan dado el paso del veto por su cuenta, al igual que ha ocurrido en Extremadura.

el ejemplo gallego / La recién presentada norma gallega --que va en la línea de lo que se quiere plantear aquí-- recoge como infracción grave el maltrato animal no solo en su representación como violencia, sino también por someter a los animales a condiciones higiénicas y sanitarias cuestionables.

La medida pone el foco en la prohibición de todo tipo de herramientas destinadas a impedir o limitar la movilidad de un animal, que les produzca daños o sufrimientos, o no les deje mantener su posición normal (algo que puede ocurrir, por ejemplo, con los grandes felinos encerrados en jaulas mínimas). También se señala como obligación abrevar y alimentar a los animales durante el transporte y emplear equipos adecuados en la carga y descarga que no produzcan daño.

Un texto de características similares a los ya existentes llegará en breve a Extremadura.