El centro de refugiados de Mérida esperaba recibir ayer a veinte refugiados del conflicto sirio, pero su llegada queda aplazada a la espera del visto bueno del gobierno central, según Cruz Roja. La organización internacional achaca la demora a cuestiones relacionadas con trámites administrativos. En ese sentido, apuntan que el ministerio alega «falta de documentación» y pospone su llegada hasta que se resuelvan las diligencias burocráticas. El dispositivo lleva operativo desde hace semanas con doce trabajadores y voluntarios de Cruz Roja que gestionarán recursos educativos, psicológicos, sanitarios y legales. Con la llegada de este contingente, serán 36 los asilados sirios que residirán en Extremadura a falta de cuatro meses para que expire el convenio de acogida que comprometía la llegada de 350 personas a la región y 17.000 al país.