Cinco años de espera con el convencimiento de que se crearían más de 1.800 empleos durante su construcción, pero finalmente ha recibido un varapalo. Tras el estudio de los técnicos, se considera que el gran proyecto fotovoltaico previsto en la provincia de Badajoz (entre Calzadilla de los Barros, Bienvenida y Medina de las Torres) y que aspiraba a ser referente único en Europa (con 394,1 MW en más de 560 hectáreas; promovido por Iberia Termosolar SL con una inversión de 160 millones), se queda en la mitad (224 MW) al no respetar el medioambiente. Dos de las cuatro plantas diseñadas (las de Calzadilla) suponen «impactos adversos significativos sobre fauna amenazada incluidas en el Régimen de Protección Especial, Catálogo Español de Especies Amenazadas y Catálogo Regional de Especies Amenazadas de Extremadura», recoge el BOE, que publicó ayer la DIA (Declaración de Impacto Ambiental). Se refiere a la avutarda, el sisón, el aguilucho cenizo y el cernícalo primilla, entre otras.

También advierte de la destrucción o deterioro de lugares de reproducción de algunas de estas especies, prohibidas por el artículo 57 de la Ley 42/2007, de 13 de diciembre, de Patrimonio Natural y Biodiversidad.

Según la resolución, el planteamiento y valoración de alternativas no ha sido correcto, ya que se considera que las medidas previstas por el promotor no son una garantía suficiente de su completa corrección o su adecuada compensación. «El desarrollo del potencial solar de la región, con un impacto muy favorable, tanto desde el punto de vista ambiental como socioeconómico, no debe realizarse a costa de degradar la riqueza natural y paisajística del entorno», argumenta Medio Ambiente.

Tras la reciente subasta de renovables, en la que la región se quedó sin poder optar a nuevas plantas porque toda la potencia adjudicada fue para la energía eólica (aunque se ha anunciado una nueva puja), la fotovoltaica, planteada como fuente de empleo, recibe ahora un nuevo golpe en Extremadura.

DESFAVORABLE / La DIA desfavorable ha sido para las plantas Calzadilla I y II, de 50,1 y 120 MW de potencia, respectivamente, lo que supone 170,1 megavatios y 242,8 hectáreas. Sí ha sido favorable para Calzadilla III y B, así como a los tramos de línea de evacuación correspondientes. La primera de ellas es de 74 MW y se reparte entre Medina de las Torres y Calzadilla de los Barros; la segunda, en Bienvenida, aporta 150 MW. Entre ambas suman 224 megavatios (y 319,7 hectáreas).

En este caso sí quedaría protegido el medioambiente, pero se advierte de una serie de acciones, como delimitar con más precisión la existencia de estructuras arqueológicas en el subsuelo de los yacimientos Cortijo de San Antonio, a 79 metros de un apoyo de la línea eléctrica; y La Tosca, en caso de coincidir con el trazado de la línea.

Superados todos los trámites, se iniciará la obra de este parque fotovoltaico reducido a la mitad, aunque desde el Ayuntamiento de Calzadilla advierten que, junto a la promotora, pelearán para que el proyecto pueda ampliarse.