La Plataforma de Asociaciones Protectoras de Animales de Extremadura ha solicitado formalmente a la Junta de Extremadura que desarrolle el reglamento de la Ley regional de Protección y Defensa de los Animales, en vigor desde 2002, y que de forma inmediata regule la identificación de las mascotas mediante un microchip y que sus datos sean recogidos en un censo regional de animales de compañía.

Este sistema de identificación, que ya es obligatorio en otras comunidades autónomas, tiene actualmente un carácter voluntario en Extremadura. Consiste en insertar una pequeña cápsula bajo la piel de los animales, que no les causa ninguna molestia, y que sirve para identificar de forma inmediata tanto a los propietarios como a las mascotas.

Este sistema es efectivo para localizar a los dueños en aquellos casos en los que el animal se extravía, así como para aquellos en los que las mascotas son abandonadas.

El colectivo mantuvo ayer en Mérida una reunión con el consejero de Agricultura y Medio Ambiente, Juan María Vázquez, en la que le entregaron un borrador de reglamento para el desarrollo de la citada Ley, acompañado por 1.200 firmas recogidas por las asociaciones que componen la plataforma, procedentes de distintos puntos de Extremadura.

La plataforma propone además la creación de un Servicio de Protección Animal en la Junta de Extremadura especializado en la materia, así como un censo de entidades y veterinarios colaboradores. El borrador recoge las condiciones y funcionamiento de los centros de acogida o de la formación de profesionales, y exige la implicación de los colegios de veterinarios.

CAMPAÑAS EDUCATIVAS Con el ánimo de implicar más a la sociedad, proponen además el desarrollo de acciones divulgativas del contenido de la norma, además de campañas educativa de sensibilización.

La plataforma, con ámbito de actuación en Badajoz, Cáceres, Mérida, Guareña, Miajadas, Valencia de Alcántara y Plasencia, recogió el pasado año 2007 a un total de 1.292 mascotas, e interpuso 31 denuncias ante las autoridades. Sin embargo, constatan que el número de abandonos que se producen en la región es mayor, y que no pueden dotar a más animales de un refugio por falta de espacio y de medios económicos.

Para cambiar esta situación, solicitan a la Junta de Extremadura que reconozca que estas asociaciones protectoras realizan una labor que es competencia de la administración autonómica.