El presidente de Suráfrica, el polígamo Jacob Zuma, echó de su casa la pasada Navidad a una de sus esposas por haberle sido infiel con un guardaespaldas. Zuma, con 20 hijos reconocidos, casado cinco veces, con tres esposas ahora y una novia con la que piensa casarse, defiende la poligamia como una tradición de los jefes del pueblo zulú.