A pesar del frío y el hielo, el príncipe Guillermo ha querido vivir a fondo su trabajo humanitario. El futuro rey de Inglaterra pasó una noche durmiendo en las calles de Londres junto a los sin techo . El primogénito de Carlos de Inglaterra eligió la pasada semana un rincón, muy cerca del céntrico puente de Blackfriars, para extender su saco de dormir. La experiencia formaba parte de sus tareas como patrón de la oenegé Centrepoint, volcada en la ayuda a gente joven sin un lugar donde vivir.

La primera vez que Guillermo visitó la organización favorita de su madre, Diana de Gales, lo hizo con ella, cuando era un niño. Tras la muerte de la princesa, él ha tomado el relevo. "Pobreza, enfermedades mentales, dependencia del alcohol y las drogas y rupturas familiares son la causa de que mucha gente se vea en la calle", ha declarado el príncipe, que quería llamar la atención de sus compatriotas sobre este gran problema social.

A CUATRO BAJO CERO El nieto de Isabel II también ha querido entender mejor lo que sienten quienes deben dormir en las aceras, incluso en los meses más crudos del invierno. Durante la noche que pasó a cielo raso, la temperatura descendió a cuatro grados bajo cero. Guillermo tuvo por compañero a su secretario particular, Jamie Lowther-Pinkerton, y a Seyi Obakin, el gestor de la oenegé. Los tres trataron de protegerse del frío colocando cartones sobre el pavimento y aislándose parcialmente con una muralla de cubos de basura. "Pero no había protección contra el terrible frío, el suelo duro o el miedo a verse acosados por los vendedores de drogas, los chulos o esos a los que les gusta dar a los sin techo una buena paliza", ha escrito Obakin en la página en internet de la organización. "Además, había obras muy cerca y mucho ruido. No había manera de pegar ojo", declaró después a la BBC.

Según Clarence House, la experiencia contó con "un pequeño elemento de seguridad". A las 6 de la mañana, Guillermo y su compañero recogieron el petate y se fueron a ver a otros sin techo que duermen en el West End. Ya en el Soho, entraron en los locales de Centrepoint, donde pudieron darse una ducha caliente, cambiarse de ropa y tomar un desayuno, que el príncipe preparó. Durante sus 40 años de existencia, la oenegé, instalada en los sótanos de una iglesia, ha proporcionado ayuda a unos 73.000 jóvenes sin techo , poniendo una cama a su disposición y otro tipo de recursos.

Guillermo y su hermano, Enrique, han creado juntos el llamado Fórum de los Príncipes, que se reúne dos veces al año y en el que están integradas todas las organizaciones a las que ambos prestan su ayuda. Los grupos que han elegido reflejan lo variado de sus intereses, ya que van desde la atención a niños enfermos hasta el apoyo a la Unión Galesa de Rugby.