UNOS 200 DEFENSORES de los derechos humanos, principalmente miembros de Amnistía Internacional (AI), se manifestaron ayer delante de la Casa Blanca. Lo hicieron mientras George W. Bush firmaba la ley que autoriza el endurecimiento de los interrogatorios contra los sospechosos de terrorismo y facilita los juicios ante comisiones militares. Según la AI, Bush "está creando un clima en el que se producirán más violaciones de los derechos humanos".