El viceprimer ministro chino Li Kegiang admitió en el 2007 que ciertas estadísticas en el país eran "artesanales" y por tanto no fiables. Li, presentado como el probable sucesor del primer ministro, Wen Jiabao, dirigía el Partido Comunista Chino en la provincia de Liaoning, en el noreste del país, cuando hizo estas observaciones ante el embajador de EEUU de la época, Clark Randt. El diálogo fue incluido en un mensaje enviado a Washington.