El presidente del Gobierno, José María Aznar, negó ayer en el pleno del Congreso de forma categórica que España haya comprometido tropas para la guerra con Irak. Visiblemente enfadado con Gaspar Llamazares, líder de Izquierda Unida (IU), que fue quien le lanzó la acusación, Aznar aseguró que "el Gobierno no tiene ningún compromiso ni ha asumido ninguna decisión en lo que significan movimientos militares".

"LA GUERRA DE BUSH"

En la sesión de control del Congreso, Llamazares afirmó que el presidente no dice la verdad cuando proclama que defiende la paz, porque pone "batallones y fragatas a favor de la guerra del señor Bush". El líder de IU hacía alusión al envío de una fragata al Mediterráneo oriental y otra para reforzar la seguridad en el estrecho de Gibraltar, de cara a posibles atentados contra buques de la Sexta Flota norteamericana.

El jefe del Ejecutivo respondió que, si Llamazares estaba insinuando que el Gobierno ha comprometido fragatas y batallones para la guerra, estaba mintiendo. "Está faltando a la verdad gravemente, intentando engañar a la gente", dijo.

Aznar conversó telefónicamente con Bush después del pleno para un "intercambio de información". "Creo que se trabaja intensamente para conseguir una nueva resolución (del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas)", declaró Aznar tras entrevistarse en Madrid con el primer ministro de Portugal, José Durau Barroso, informa M. Jansa.

El ministro de Defensa, Federico Trillo, dijo horas antes en TVE que no se ha comprometido "ni una sola fuerza, ni un militar español, en ninguna operación, entre otras cosas porque nadie está todavía preparando".

La oposición también interrogó al presidente sobre la posición que va a adoptar España en el Consejo de Seguridad de la ONU que se reúne mañana, pero Aznar no adelantó nada ni varió los criterios que ha mantenido hasta ahora. Tanto el líder del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, como Llamazares, le pidieron que apueste por la posición de Francia y Alemania y otorgue más tiempo y más medios a los inspectores de la ONU.

Zapatero pidió al presidente "que tenga en cuenta" el gran consenso que hay en favor de la paz. España, agregó, es una país de puentes y de acuerdos y "la mejor garantía de la seguridad es la paz, no la guerra". Aznar invirtió el orden de esas palabras y respondió que "la seguridad es la mejor garantía de la paz, porque la paz no se regala a nadie ni viene sola".

Por otra parte, la Armada ha reforzado la vigilancia y el control del estrecho de Gibraltar con la fragata Numancia .