El Gobierno británico ha prometido revisar "urgentemente" la legislación que permitió lanzar una orden de detención por presuntos crímenes de guerra contra la exministra de Exteriores israelí, Tzipi Livni. Israel es "un aliado estratégico y un país amigo" y los responsables británicos van a tomar medidas para "cambiar el sistema y evitar que este tipo de situaciones vuelvan a producirse", ha señalado el ministro de Exteriores David Miliband.

La orden contra Livni fue cursada por el tribunal de Westminster Magistrates Court, a instancias de varias familias palestinas, que responsabilizan a la dirigente del partido Kadima de una ofensiva militar israelí hace un año en Gaza. Livni decidió cancelar el viaje a Londres y la orden de detención quedó anulada el lunes. El incidente, calificado ayer por el presidente de Israel, Simon Peres, como "el mayor error del Reino Unido hacia Israel", abochorna al Gobierno británico.

Gordon Brown telefoneó ayer a Livni para disculparse y decirle que "siempre será bienvenida" en el país.