Al menos 30 personas han muerto y unas 57 han resultado heridas a consecuencia de un ataque suicida registrado hoy durante el funeral de un líder chií en el centro de Pakistán, al que han seguido disturbios con la policía, según informan las fuerzas de seguridad. El atentado se ha registrado en las cercanías de un cementerio en la ciudad de Dera Ismail Khan, de acuerdo con fuentes policiales citadas por el canal de televisión paquistaní Dawn TV. "Ha sido un atentado suicida. El agresor se había infiltrado en una procesión funeraria chií", ha confirmado un portavoz de la policía provincial.

Tras la explosión, decenas de personas enfurecidas han atacado un puesto de control policial cercano y han comenzado a lanzar piedras y destruir vehículos en la zona, lo que ha dificultado la operación de rescate y el traslado de heridos a los hospitales.

La autoría del ataque

Por el momento, ningún grupo ha reivindicado la autoría de lo sucedido y las autoridades han ordenado el despliegue del Ejército para restablecer el orden en la zona. En la ciudad, se registran tiroteos y la mayoría de las tiendas y mercados han cerrado sus puertas tras el ataque. Las autoridades han puesto los hospitales en estado de emergencia para atender a los heridos.

Tanto el primer ministro de Pakistán, Yusuf Razá Guilani, como el presidente, Asif Alí Zardari, se han apresurado a condenar el atentado, según el canal televisivo Geo TV.

Según un informe difundido en enero pasado por un centro de estudios geoestratégicos, casi 8.000 personas murieron en 2008 a consecuencia de la violencia en Pakistán, donde tuvieron lugar más de 2.000 actos de terrorismo.