EEUU y Gran Bretaña parecían ayer más aislados que nunca en el Consejo de Seguridad de la ONU en su empeño de derrocar por la fuerza a Sadam Husein. China y Rusia, dos miembros permanentes y con derecho a veto de este organismo, expresaron ayer su oposición a una operación militar inmediata y pidieron más tiempo para que la diplomacia y las inspecciones de desarme cumplan con su cometido. Paralelamente, los principales países musulmanes fronterizos con Irak se reunieron en Estambul para enviar lo que denominaron "una clara y fuerte señal a EEUU" en contra de una intervención militar.

La primera potencia con derecho a veto en la ONU en manifestarse en contra de una inmediata acción bélica fue China. Una portavoz del Ministerio de Exteriores chino declaró en Pekín que la postura de su país era "muy similar" a la de Francia, es decir, por el momento no hay ninguna razón de peso que justifique la guerra, y hay que esperar a que los inspectores pongan de manifiesto la voluntad de Sadam Husein de no cumplir con las resoluciones de las Naciones Unidas.

RUSIA SE OPONE

Pocas horas después, fue el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Igor Ivanov, quien, desde Atenas, aseguró que "todavía hay margen político y diplomático para resolver la crisis de Irak".

No lejos de allí, en Estambul, los titulares de Exteriores de cinco países fronterizos con Irak --Siria, Jordania, Arabia Saudí, Irán y Turquía--, además de Egipto, se reunieron ayer para expresar su oposición a la guerra. La mayoría de los estados presentes en Estambul mantienen relaciones amistosas con EEUU e incluso Siria ocupa un asiento de miembro no permanente en el Consejo de Seguridad. A pesar de que todos ellos comparten la postura contraria a la guerra, los mentideros diplomáticos de Turquía se mostraron escépticos ante la posibilidad de que en Estambul pudiera aprobarse un comunicado común. Algunos de los estados presentes en la cumbre --Siria, Egipto e Irán-- pretendían incluir en el texto una advertencia a EEUU, a lo que se oponen los gobiernos más moderados.

SEGUNDA CUMBRE

En el aire está la posibilidad de convocar una segunda cumbre de países fronterizos con Irak, en esta ocasión en Damasco. En lo que todos coinciden es en la necesidad de aunar esfuerzos con la UE, en particular con Francia y Alemania, para frenar la guerra.