El primer ministro francés, Jean-Pierre Raffarin, intervino ayer públicamente para restar importancia a las "fricciones" entre los ministros de Economía y Finanzas, Nicolas Sarkozy, e Interior, Dominique de Villepin. Con la elaboración del presupuesto, ambos ministros se disputan el liderazgo del partido presidencial UMP (Unión por un Movimiento Popular) y, a la larga, la sucesión del presidente, Jacques Chirac.

Para "preservar la unión de la mayoría", Raffarin está dispuesto incluso a presentar su candidatura para la presidencia de la UMP en el próximo congreso. El primer ministro también afirmó que se mostrará "intransigente" ante las "ambiciones personales" de algunos ministros (lease Sarkozy). "Lo único que pido es que se pongan al servicio de los franceses" concluyó.

Ante la posibilidad de que varios ministros presenten candidatura para sustituir al presidente de la UMP, Raffarin dijo estar dispuesto a tomar las riendas del partido sin soltar las del Gobierno, para evitar nuevas fricciones. Las rivalidades entre ministros se han visto agudizadas estos últimos días con motivo de la elaboración del presupuesto del 2005.