EL ATENTADO DE AYER PUEDE ENVENENAR AUN MAS LAS YA DETERIORADAS RELACIONES ENTRE EL GOBIERNO SIRIO Y LA ADMINISTRACION BUSH

LOS ´MALOS´ AMIGOS

Las alianzas del Gobierno sirio en el mundo árabe son lo que más irrita a Washington. Damasco mantiene relaciones estrechas con Teherán y desde hace años da respaldo a la guerrilla libanesa de Hizbulá, por no hablar del apoyo a los distintos movimientos radicales palestinos.

LA SALIDA DEL LIBANO

El asesinato de Rafik Hariri, exprimer ministro libanés, en febrero del 2005, fue el detonante de la retirada siria del Líbano tras 30 años de presencia en el país. La presión de la Casa Blanca, que denunció entonces "la ingerencia siria en el Líbano", fue determinante. Washington llegó incluso a amenazar con endurecer las sanciones que había impuesto en el 2004 a Damasco por ayudar a los grupos integristas árabes.

MULTIPLES AMENAZAS

El Gobierno de EEUU no ha incluido a Siria en la lista de países que integran el "eje del mal" ni en la de los que Condoleezza Rice calificó como "bastiones de la tiranía", pero durante los últimos años se ha prodigado en amenazas contra Damasco. Las más duras las pronunció Bush en el 2003 y el 2004, cuando acusó a Siria de ayudar a la insurgencia iraquí.